El Grupo de Minsk en Armenia

Buscan reanudar el proceso de negociaciones por Artsaj

30 de marzo de 2017

serge-y-copresidentes

Ereván (Fuentes diversas).- El presidente armenio recibió el lunes 27 de marzo a los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE, embajadores Igor Popov de Rusia, Stephane Visconti de Francia y Richard Hoagland de Estados Unidos, a quienes acompañaba también el representante personal del presidente en ejercicio de la OSCE, Andrzej Kasprzyk.

En el encuentro, del que participó además el canciller Eduard Nalbandian, los mediadores impusieron a Sarkissian los pormenores de su visita a Azerbaidján hace dos semanas. También se discutieron las formas de impulsar la reanudación de las negociaciones de paz, así como la perentoria necesidad de implementar los acuerdos alcanzados en las cumbres de Viena y San Petersburgo. Previamente los copresidentes habían mantenido una reunión de trabajo con Nalbandian.

En la rueda de prensa posterior a las entrevistas con el gobierno armenio, el embajador estadounidense Richard Hoagland dijo que se esperaba que en un futuro próximo los ministros de Asuntos Exteriores de Armenia y Azerbaidján se reunieran, tal vez en Moscú, para sentar las bases de una nueva cumbre entre Sarkissian y Aliev.

"Este es el momento para reanudar las negociaciones. No podemos permitir que la violencia bélica sea la solución de este problema de tan larga data", aseguró Hoagland. El copresidente habló de revitalizar propuestas ya conocidas y aceptadas, pero cuando se le interrogó respecto al tenor de las mismas, Hoagland prefirió no hacerla públicas. "¿Quien redactó este plan?, yo no voy a comentar eso, pero debo decir que me parece que su contenido es bueno y está aprobado internacionalmente", agregó.

De todas maneras hace tiempo que Moscú viniendo presionando a través de su canciller Lavrov para que las partes acuerden un trato a partir la salida de las tropas armenias de ciertas regiones que hoy son consideradas por Armenia como zonas de seguridad imprescindibles. Bakú tampoco aceptaría esta instancia y su postura involucraría el retiro total de las fuerzas armadas armenias y la transformación de Artsaj en un estado autónomo en el territorio azerí. En este estado de cosas pronosticar un pronto desenlace es una utopía.

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