Marcha en Armenia en apoyo a Samvel Karapetyan, preso político del régimen de Nikol Pashinyan

Miles de personas se movilizaron el 4 de julio en Ereván para exigir la liberación de Samvel Karapetyan, empresario, filántropo y propietario del Grupo Tashir y la Compañía Eléctrica Armenia, actualmente detenido bajo una orden de prisión preventiva de dos meses tras haber criticado públicamente la gestión del primer ministro Nikol Pashinyan. La manifestación comenzó frente a la estatua de Aram Manukyan y concluyó en el Parque Seasons, donde se proyectó una película sobre la trayectoria de Karapetyan.
El acto reunió a dirigentes comunitarios, miembros del clero, entre ellos el arzobispo Ezras, Primado de la Diócesis de Rusia y Nueva Nakhijevan de la Iglesia Apostólica Armenia, y diputados de la oposición, como Aghvan Vardanyan y Anna Grigoryan. “Nos hemos reunido aquí para defender a Samvel Karapetyan, quien fue encarcelado por criticar al poder gobernante”, denunció el obispo Gevorg Saroyan, que relacionó el caso con la campaña de persecución contra la Iglesia Armenia.
Tras la manifestación, los asistentes marcharon por la avenida Mashtots hasta la sede del Servicio de Seguridad Nacional (NSS), donde permanecen detenidos Karapetyan, el arzobispo Bagrat Galstanyan y el arzobispo Mikayel Ajapahyan. La marcha, encabezada por familiares de Karapetyan y representantes religiosos, culminó con la recitación del Padre Nuestro y una promesa de continuar la lucha. En un mensaje enviado desde su celda y leído por su abogado, Karapetyan afirmó: “Nikol Pashinyan y su gobierno no tienen nada que ver con Armenia y no deberían tener nada que ver con el futuro del pueblo armenio”.
Horas después, la Justicia decidió mantener la prisión preventiva de Karapetyan. Sus abogados habían apelado la medida pero retiraron la presentación al declararse sin confianza en el juez Armen Danielyan, quien igualmente examinó el caso. El abogado Ruben Hakobyan advirtió que recurrirán al Tribunal de Casación y sostuvo que “no esperábamos otra cosa de este juez, cuyas decisiones reflejan la postura de la fiscalía”. Paralelamente, Karapetyan demandó a dos diputados oficialistas, Arsen Torosyan y Hayk Konjoryan, por injurias y difamación tras declaraciones en el Parlamento en las que lo acusaron de conspirar contra el Estado. La defensa del empresario reclama una compensación de 18 millones de drams.
En declaraciones a la prensa, Narek Karapetyan, vicepresidente del Grupo Tashir, afirmó: “Haremos declaraciones sobre nuestros próximos pasos. Este es el comienzo de un largo camino”.