La FRA Sudamérica comenzó su 83º Asamblea General: “El Tashnagtsutiún no es solo un partido, es una escuela”

El 4 de julio comenzó en Buenos Aires la 83º Asamblea General Regional (Shrchanaín Yoghov) de la Federación Revolucionaria Armenia (FRA - Tashnagtsutiún) de Sudamérica en la Biblioteca Daghlian de la Asociación Cultural Armenia, el congreso regional de representantes en el que el partido define lineamientos, debate y vota proyectos para su próximo período de trabajo y renueva autoridades. La Asamblea General cuenta con representantes de las regiones de Argentina (Buenos Aires y Córdoba), Uruguay (Montevideo) y Brasil (San Pablo).
La apertura contó con la participación de representantes de instituciones de la comunidad armenia, entre ellos monseñor Kissag Mouradian (Iglesia Apostólica Armenia), Diego Zakian (Homenetmen Sudamérica), Maral Masrian (HOM Sudamérica), Juan Berberian (Homenetmen Buenos Aires), Carlos Margossian (UGAB Buenos Aires), Sergio Nahabetian (Oraginización Demócrata Liberal Armenia - Ramgavar), Eduardo Ohanian (Partido Social Demócrata Hnchakian) y el Reverendo padre Ieghishé Nazarian (Iglesia Apostólica Armenia).
En su discurso de apertura, Hagop Tabakian, representante del Comité Central de la FRA-Tashnagtsutiún de Sudamérica, subrayó que este nueva Asamblea Regional se realiza en un momento clave para la nación armenia. “La situación en Armenia, observada desde afuera, es preocupante”, advirtió, refiriéndose al contexto regional, a la derrota militar en Artsaj y a la presión del eje turco-azerí.
El dirigente criticó al gobierno de Nikol Pashinyan por promover "un modelo que debilita al Estado, modifica los fundamentos de la república, y responde de manera complaciente a presiones externas". "Las autoridades persiguen una estrategia que, en lugar de consolidar la unidad nacional, genera divisiones, degrada el rol de la diáspora, de sus instituciones, e incluso de la más antigua de las nuestras: la Iglesia Apostólica Armenia. Todo porque el gobierno está empecinado en intentar desacreditar la causa de Artsaj, y el programa de Causa Armenia como tal".
Más adelante Tabakian aseguró que "Los aparatos estatales se movilizan para perpetuar el poder, incluso si eso implica sacrificar los ideales democráticos, la justicia y el sentido de pertenencia nacional. El poder por el poder se ha convertido en la prioridad del gobierno", dijo y continuó: "El Primer Ministro ha aprovechado encuentros con pequeños grupos de la Diáspora para emitir declaraciones que contradicen la lucha histórica del pueblo armenio. Ha despreciado la causa del genocidio, minimizado los derechos nacionales y promovido una visión revisionista influida por intereses extranjeros".
"No se puede permitir que el Estado contradiga los principios nacionales. El aparato estatal debe servir a una visión estratégica basada en la identidad y en la defensa de los intereses de la nación. Este escenario genera preocupación y dolor en la diáspora y en Armenia, amenazando con fracturar la relación entre ambos. Esta ruptura es inaceptable y debe evitarse a toda costa", advirtió Tabakian.
Tabakian reafirmó la misión de la FRA de sostener la Causa Armenia, acompañar a los desplazados de Artsaj, exigir su regreso seguro y denunciar las violaciones de derechos humanos, fortaleciendo alianzas con actores clave como Rusia e Irán y defendiendo la soberanía e identidad armenia. "Fiel a su compromiso con la causa nacional, la FRA está lista para actuar con toda su fuerza ante la crisis actual".
"El Tashnagtsutiún no baja banderas. Porque las banderas son nuestra identidad política. La bandera de Artsaj no se arrea, porque representa la resistencia a perder nuestra esencia nacional", culminó sus palabras Hagop Tabakian.
Por su parte, Agustín Analian destacó que el Tashnagtsutiún “no es solo un partido: es una escuela” y un espacio de formación política, debate y renovación generacional. “No creemos en verdades absolutas ni imposiciones”, afirmó, y reivindicó el carácter descentralizado y democrático del partido.
Analian llamó a la militancia a redoblar esfuerzos para sostener la causa de Artsaj, apoyar a la comunidad desplazada y resistir los intentos de reescribir la historia nacional. “Si no militamos por Artsaj, ¿por quién militamos?”, enfatizó. Citando a Ruben Der Minasian, cerró: “El que se cansa de luchar muere. El que vive con el fervor de la lucha, vive y vence”.




