Opinión

21 de Septiembre: 24 años de la recuperada independencia

25 de septiembre de 2015

armenia independenciaEste 21 de Septiembre, millones de armenios y sus descendientes rinden homenaje al 24° aniversario de la recuperada Independencia de la República de Armenia. Con la nueva primavera que está llegando a las colectividades de América del Sur, hacemos un balance de las expectativas que hoy movilizan a toda la nación, en las demandas de reunificación, de independencia, y el anhelo de un futuro mejor para todos.

Haciendo realidad esos objetivos, gracias a la férrea voluntad de los que hoy conforman la armenidad, se incorporó una nueva fecha a su rico calendario histórico. Resistiendo el despojo territorial, las persecuciones que retrasaron el renacimiento cultural y la industrialización tardía del país, se buscó que Armenia pueda seguir avanzando. Sin embargo, es innegable que la política económica de los gobiernos que asumieron ese compromiso, provocó perjuicios tan indeseables como la debilidad demográfica y la despoblación de la madre patria.

En estos días, la reforma constitucional en discusión intenta mejorar la crítica imagen de un pueblo que conquistó la libertad, que supo organizar su ejército, pero que aún carece de la justicia social para todos que permita vislumbrar tiempos mejores. En la diáspora, imbuidos del espíritu del Centenario, también hay desafíos que no se han concretado, aunque también destacando los logros conseguidos.

Aún es insuficiente la presencia armenia en el mundo actual, cuando los recientes hechos políticos internacionales demuestran cómo se pueden concretar el diálogo y el acercamiento ente los pueblos, en el Caribe o en el Atlántico Sur. En el primer caso, el papa Francisco pudo hacer realidad la premisa de la hermandad cristiana, aunque todavía en la metrópolis de las islas coloniales y usurpadas, no dialogan sobre una administración conjunta de las Malvinas.

Para defender nuestros derechos humanos, entre todos y para todos, denunciemos toda violación a la causa de los pueblos, tanto sea para juzgar el plan genocida panturquista, como la responsabilidad de Bakú en los pogromos y el continuo ataque al pueblo karabaghí.

El camino hacia la independencia que tanto han anhelado nuestros ancestros, y por el cual han luchado y dado la vida muchos armenios; estuvo plagado de enormes sacrificios, pero el objetivo fue alcanzado.

La vida de cada armenio está ligada a su conciencia ciudadana, y al valor de la existencia como nación. Cada ciudadano es un símbolo de los derechos humanos. Y el amor a la patria es una extensión de esa mente, y la fuente de esa acción.

En cuanto a la preservación de nuestra identidad, las instituciones deben cumplir un más que importante rol, el de desarrollar la integración cultural con el expreso compromiso de transformarse en el verdadero ámbito de la unión comunitaria.

En el Centenario del Genocidio busquemos hacer realidad los conceptos de la proclama panarmenia del 24 de Abril por la reivindicación de la Causa Armenia.

Celebremos este 24° aniversario del 21 de Septiembre, sin dejar de integrarnos interna y externamente, buscando concretar la recuperación de los derechos que les fueran negados a nuestros mayores. Son miles y miles los argentino-armenios que traen su aporte como ciudadanos cabales, y portadores de una tradición y una valiosa herencia para toda la humanidad.

Carlos Luis Hassassian

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