85 Años y 13.600 ediciones después
Cada 24 de Abril el Diario ARMENIA cumple un nuevo aniversario de su fundación. Y cada vez que una nueva edición llega a nuestros lectores, quienes integramos la redacción de este periódico sentimos una vez más que hemos cumplido con nuestro deber.
Con mínimos recursos y mucho de ingenio y sacrificio aquellos desterrados, sobrevivientes del Genocidio, fundaron Armenia. Pocos imaginaron entonces que ese emprendimiento lograría atravesar el fin del siglo XX y sobrevivir en estos tiempos de urgencias informativas y avances tecnológicos.
ARMENIA es el resultado de decenas de dedicados compatriotas que entregaron horas de su familia y descanso trabajando, muchos de ellos sin percibir emolumento alguno. Y hasta hubo quienes se obligaron a aportar parte de sus magros ingresos laborales para que la comunidad contara con su medio informativo.
Recordar a todos ellos en estas pocas líneas es imposible. Pero con satisfacción podemos afirmar que muchos de sus descendientes aun hoy siguen apoyando nuestra diaria labor. Tampoco podemos olvidar a todos aquellos nos acompañan semana tras semana como suscriptores o avisadores.
La prensa comunitaria armenia de todo el mundo posee al menos en lo económico, similares dificultades debiendo recurrir a múltiples medios para lograr subsistir.
Pocas semanas atrás tuvimos la oportunidad de conversar con el editor de dos importantes medios de prensa armenios del Líbano. Compartimos experiencias y nos alentamos mutuamente, pues cada uno de las dificultades que debemos superar cotidianamente en la Argentina eran similares a las que nuestros colegas debían enfrentar también en Beirut.
Pero no tomemos estas palabras como un lamento. Avanzado ya el segundo decenio de este nuevo siglo, sabemos que tenemos que adaptarnos a los nuevos modos informativos a través de las redes sociales. De hecho, ARMENIA posee una presencia muy activa tanto en Facebook como en Twitter por lo que nuestros seguidores jamás quedan desinformados.
En el Centenario del Genocidio Armenio, los medios de prensa comunitarios llevaron adelante una importante labor. Tanto los gráficos como los radiales se brindaron día a día para sostener la continuidad de la información y la profundidad y alcance de la convocatoria comunitaria.
Tal vez sea el momento ahora de buscar ahondar nuestro trabajo para alcanzar nuevas metas. Integrar a toda la comunidad alrededor de todas nuestras instituciones es una perentoria obligación. Para ello es primordial que periódicos, sitios web y audiciones radiales busquen llegar a más hogares armenios.
Sabemos que somos muchos. Lo comprobamos en los actos del Centenario. Pero, hay una verdad irrefutable, hay muchos más fuera del ámbito comunitario que dentro de él. Y una manera de llegar a ellos es a través de nuestra prensa y los medios digitales.
Es necesario que entre todos busquemos los mecanismos necesarios para subsanar este verdadero problema. La ausencia de decenas de miles de compatriotas no debe tomarse como una causa perdida. Sobran los ejemplos de cómo se han integrado muchos jóvenes a través de diversas formas de contacto.
Pero de continuar este déficit, en pocos años nos enfrentaremos a un verdadero dilema, por lo que conocida la realidad tratemos de enfrentarla con inteligencia y decisión.
Jorge Rubén Kazandjian