El Consejo Nacional Armenio lanza campañas para denunciar que la UFC en Bakú busca encubrir la limpieza étnica de Azerbaiyán contra la población armenia de Artsaj
El Consejo Nacional Armenio lanzó una serie de campañas para denunciar que el evento de la UFC programado para el 21 de junio en Bakú constituye un intento del régimen de Ilham Aliyev de utilizar el deporte internacional para lavar su imagen tras la limpieza étnica de la población armenia de la República de Artsaj (Nagorno Karabaj), perpetrada entre 2020 y 2023.
“La comunidad internacional se enfrenta a una dura disyuntiva: seguir cómplice de la campaña de propaganda de Azerbaiyán o aprovechar estos momentos de gran repercusión para visibilizar el sufrimiento que continúa a puerta cerrada”, declaró Aram Hamparian, director ejecutivo del Consejo Nacional Armenio de Estados Unidos (Armenian National Committee of America - ANCA). “Para muchos armenios y defensores de los derechos humanos, la batalla de la UFC en Bakú quizá no sea recordada como una celebración del deporte, sino como una oportunidad perdida para exigir responsabilidades a un régimen genocida”.
El ANCA lanzó una petición pública para que el director de la UFC, Dana White, utilice el evento para condenar la limpieza étnica y los crímenes de guerra cometidos por Azerbaiyán, que en septiembre de 2023 lanzó una ofensiva militar que forzó el desplazamiento de más de 120.000 armenios de Artsaj. A esto se suma la detención de dirigentes políticos y civiles, la destrucción del patrimonio cultural armenio y el bloqueo previo de diez meses, catalogado por expertos como genocida.
En ese marco, el Consejo Nacional Armenio denunció que la UFC, al elegir Bakú, se convierte en una plataforma más del intento de Azerbaiyán por encubrir crímenes que continúan impunes. “Azerbaiyán puede lograr traer la UFC a Bakú, pero no puede evadir la verdad a golpes”, concluyó Hamparian.
El Consejo Nacional Armenio de Reino Unido (Armenian National Committee of UK - ANC-UK) denunció también la instrumentalización del evento deportivo para legitimar internacionalmente al régimen de Bakú. “No se trata solo de un evento deportivo, sino de un intento deliberado de lavar de imagen deportiva los crímenes de guerra y el genocidio”, señalaron, y advirtieron que la UFC corre el riesgo de alinearse con un régimen autoritario que glorifica la violencia, silencia la disidencia y vulnera sistemáticamente los derechos humanos.
El debut de la UFC en Azerbaiyán se celebrará en el Baku Crystal Hall, a pocos metros del lugar donde se encuentran encarcelados ilegalmente prisioneros de guerra armenios.
"El 21 de junio, la UFC organizará un evento en Bakú, Azerbaiyán, a pocos metros de donde prisioneros de guerra armenios son detenidos ilegalmente y maltratados. Esto no es solo deporte. Es un intento de maquillar los crímenes de guerra y el genocidio. Azerbaiyán llevó a cabo una limpieza étnica de más de 120.000 armenios en su tierra natal, Artsaj. Tras una guerra brutal, un bloqueo genocida de diez meses y un ataque final en 2023, toda la población armenia fue desplazada por la fuerza y la limpieza étnica azerbaiyana quedó impune. Ahora, Armenia se enfrenta a la amenaza de una nueva guerra. Desde la Fórmula 1 hasta el fútbol, Azerbaiyán ha utilizado el deporte mundial para ocultar sus crímenes. Ahora, la UFC está haciendo lo mismo. Hacemos un llamamiento a los atletas, aficionados y defensores de los derechos humanos para que alcen la voz. Comparte este mensaje y haz oír tu voz en redes sociales", fue el mensaje de ANC-UK.
La Society for Orphaned Armenian Relief (SOAR) envió cartas en nombre de los prisioneros y rehenes armenios en Bakú a Bruce Buffer, Dana White, Linda McMahon y a los comentaristas Jon Anik, Joe Rogan y Daniel Cormier, solicitando que “lleven su situación presente en sus corazones mientras se desarrolla el evento” y consideren brindar “un momento de concientización o un homenaje silencioso” como acto de empatía. Las cartas fueron firmadas por Luciana Minassian, presidenta de la filial de Buenos Aires de SOAR, la vicepresidenta Carolina Ouzcouchian, el fundador de SOAR George Yacoubian y Susan Snavely, directiva de SOAR.
La elección de Bakú como sede, a su vez, generó cuestionamientos por la ausencia de atletas armenios destacados en la cartelera, como Arman Tsarukyan o Edmen Shahbazyan. La exclusión fue interpretada como resultado de la armenofobia vigente en Azerbaiyán y de preocupaciones por la seguridad. En 2019, el futbolista Henrikh Mkhitaryan se negó a viajar a Bakú por razones similares, en ocasión de la final de la UEFA Europa League.
El uso del deporte como herramienta de propaganda no es nuevo para el gobierno azerbaiyano. En 2024, Bakú fue designada como sede de la cumbre climática COP29, generando fuertes críticas de organizaciones ambientalistas y de derechos humanos. En paralelo, el régimen intensificó la represión contra periodistas y activistas.