Artak Beglaryan le respondió a Ilham Aliyev: “Este dictador reconoce abiertamente que considera a Armenia como un ‘enemigo eterno’ a quien busca humillar y destruir”

El exministro de Estado de Artsaj (Nagorno Karabaj), Artak Beglaryan, respondió una por una las amenazas del presidente de Azerbaiyán Ilham Aliyev en un extenso comunicado publicado el 20 de abril.

“El dictador Aliyev una vez más amenazó e insultó al pueblo armenio y a las Repúblicas de Artsaj y Armenia en una entrevista concedida ayer a la televisión azerbaiyana. Su continuación de la política de limpieza étnica nos obliga a ser más persistentes, y es responsabilidad de la comunidad internacional tomar medidas prácticas para cumplir con su deber de proteger”, planteó el dirigente.

A continuación, el texto entero publicado por Beglaryan:

Cita de Aliyev: “Los armenios que viven en Karabaj deben aceptar la ciudadanía azerbaiyana o buscar otro lugar para vivir. Aquí hay total libertad y se ofrecen todos los fundamentos democráticos. Este tema debe resolverse sobre la base de los derechos humanos”.

Respuesta: ¿Se basa esa solución en los mismos principios democráticos y derechos humanos que los actos genocidas se llevaron a cabo contra los armenios de Azerbaiyán y Artsaj, que ahora no queda ni un solo armenio en Azerbaiyán? ¿Bajo los mismos principios que todos los armenios bajo control de Azerbaiyán que durante todo el conflicto fueron brutalmente asesinados o torturados y humillados? ¿Bajo los mismos “principios democráticos” se exhiben los armenios en el museo de “La arboleda del estratega” para la “educación” de los niños azerbaiyanos, y bajo los mismos principios, un armenio dormido es decapitado con un hacha por un azerbaiyano que se convirtió en héroe nacional? ¿Es sobre los mismos principios y derechos humanos que la sociedad azerbaiyana se alimenta del odio fascista contra los armenios y se distrae de los problemas internos, y juzgado por los mismos principios, Azerbaiyán es considerado uno de los países más dictatoriales del mundo? ¿O se refería a otros derechos humanos, su excelencia, Sr. mejor defensor de los derechos humanos, demócrata y pacifista?

El pueblo originario armenio de Artsaj tomó su decisión hace mucho tiempo. Siendo anexado al Azerbaiyán soviético en contra de su voluntad, el pueblo de Artsaj en 1988 y 1991 eligió la autodeterminación y la libertad. Nosotros, la gente de Artsaj, no tenemos otro lugar para vivir que nuestra patria, y no queremos tener la ciudadanía de ningún otro país excepto la República de Artsaj. Esta es nuestra elección basada en las normas fundamentales del derecho internacional. Vale la pena recordar que la amenaza de expulsar a las personas de su propia patria es una política de limpieza étnica, cuyos responsables algún día comparecerán ante la corte internacional.

Cita de Aliyev: “Los separatistas que se inventaron nombres falsos (uno se hace llamar presidente, ministro, jefe del parlamento), ese grupo de payasos finalmente debe comprender que no jugarán con nuestra paciencia. Tratamos de explicarles muchas veces de diferentes maneras que debían seguir nuestras palabras o irse. Los armenios que viven allí, que de hecho son sus cautivos y rehenes, deben quedarse en paz. Estoy seguro de que la mayoría de la población armenia que actualmente vive en Karabaj está lista para aceptar la ciudadanía azerbaiyana. Solo esas sanguijuelas, esos animales depredadores no dejan vivir en paz a esta gente, los tienen cautivos desde hace 30 años”.

Respuesta: Sin rebajarse al nivel del dictador Aliyev y sin usar etiquetas ofensivas en el discurso público, le aconsejaría que se mirara en el espejo y se hiciera preguntas antes de hablar: ¿quién impide que los armenios vivan en paz, quién está drenando la sangre no sólo de los armenios, sino también de su propio pueblo, quién mantiene al pueblo de Artsaj como prisionero y rehén durante al menos los últimos 130 días, quién mantiene a los prisioneros de guerra como rehenes durante años, quién fue verdaderamente elegido en elecciones democráticas y quién heredó el poder a través de múltiples violaciones y represiones de las normas de su propia constitución? También debería preguntarse quién está jugando actuaciones sangrientas y corruptas de los derechos humanos y la democracia, no solo frente a su propio pueblo sino también frente al mundo…

El pueblo de Artsaj demostró repetidamente su deseo de independencia y libertad a través de referéndums, elecciones y mítines libres. Han declarado unánimemente que no ven ningún futuro bajo el dominio de Azerbaiyán. Nuestra elección y voluntad son irreversibles porque tenemos el derecho y la determinación de decidir nuestro propio destino en nuestra propia patria, sin invadir el territorio de nadie.

Cita de Aliyev: “Nadie puede influir en nuestra voluntad. Lo demostramos durante la guerra y después de la guerra. Si surge la necesidad, lo demostraremos una vez más en todos los sentidos”.

Respuesta: Esta declaración equivale a otra amenaza del uso de la fuerza, e incluso diría que constituye una amenaza de cometer un crimen contra la humanidad, ya que menciona explícitamente el uso de “cualquier forma” de fuerza. Es particularmente preocupante viniendo de alguien que profesa estar listo para la paz y defiende los derechos humanos y otros valores similares.

Cita de Aliyev: “Que ellos (el pueblo de Armenia) piensen cuidadosamente; un día, pueden abrir los ojos y ver la bandera de Azerbaiyán sobre sus cabezas”.

Respuesta: Esta es también una clara amenaza contra el pueblo y la soberanía de la República de Armenia, incluso con respecto a la ocupación de Ereván. Y después de todo esto, ¿quién puede creerle a un dictador que “quiere” la paz y “no tiene” ambiciones para otros países y pueblos?

Cita de Aliyev: “Primero, por el hecho de que obtuvieron esa gran victoria en Armenia, un estado enemigo, el eterno enemigo tanto de Azerbaiyán como de Turquía, izaron la bandera turca”.

Respuesta: Al final, este dictador reitera y reconoce abiertamente que considera a Armenia como un ‘enemigo eterno’ a quien busca humillar y destruir. A pesar de años de políticas estatales arraigadas en el odio, las amenazas y los crímenes de los armenios, sigue siendo la víctima. Está claro que la paz y la estabilidad en la región no se pueden lograr con un enfoque tan fascista. La única solución viable es aplicar medidas prácticas internas y externas para disuadir al dictador Aliyev y prevenir más crímenes contra el pueblo armenio y la humanidad.