Artsaj: El salvaje ataque azerí provoca la represalia armenia
Stepanakert (AW, Asbarez y otras fuentes).- El Ministerio de Defensa de la República de Artsaj anunció el lunes 28 de septiembre que sus fuerzas de defensa respondieron a las agresivas acciones del enemigo azerí. De acuerdo a las informaciones proporcionadas las tropas azerbaijanas habrían sufrido más de diez bajas y un número no determinado de heridos. El gobierno de Artsaj volvió a condenar a través de su Ministerio de Defensa la agresión de Azerbaidján, advirtiendo que una nueva escalada de violencia sería de gran gravedad para el régimen de Ilham Aliev.
En tanto, el Ministerio de Defensa de Armenia también formulo una declaración a través de un comunicado. "Bakú no sólo no oculta su accionar, sino que muestra descaradamente su actitud de desprecio a la opinión pública internacional y sus obligaciones legales y humanitarias. La política de provocación, chantaje e incitación al conflicto armado no hace más que socavar los esfuerzos internacionales de mediación en el diferendo. A pesar de todo, el derecho de Artsaj a su autodeterminación es un hecho irreversible", dice la nota.
Los ataques azeríes sobre las poblaciones armenias provocaron la muerte de tres mujeres en el área de Tavush. El 24 de septiembre fallecieron como consecuencia del bombardeo azerí Baidzar Aghadjanian de 83 años de edad, Susan Asatryan de 94 años y Sona Revezyan de 41 años. El ataque se había concentrado en las regiones de Parakavar y Berdaván donde además se produjeron numerosos heridos de diversa consideración.
Al día siguiente fueron asesinados cuatro soldados armenios en una operación lanzada por las fuerzas azeríes. Norair Khachatrian (nacido en 1995), Robert Mkrtchyan (1995), Harout Akopian (1997), y Karen Shahinian (1997) cayeron bajo el ataque azerí. Hubo además varios soldados heridos gravemente que fueron trasladados a Ereván para su mejor atención.
En tanto, en Bakú la información sobre el resultado de la guerra es retaceada, en especial en lo referente a las bajas sufridas por sus tropas. Algunos medios de comunicación dieron cuenta de la muerte de cuatro militares azeríes entre el 26 y 28 de septiembre. De todas maneras la censura es generalizada y el gobierno mantiene estricto control sobre la información difundida en el país. El Ministerio de Defensa azerí sostiene que revelar el número de bajas "sirve a los intereses de Armenia".
La paranoia azerí roza el absurdo pues sus autoridades han llegado a afirmar que habría que investigar el origen étnico de quienes divulgan las malas noticias, dando a entender que los "culpables" podrían ser de origen armenio. El Comité para la Protección de los Periodistas ha declarado que Azerbaidján es el quinto país más censurado del mundo.
El Tashnagtsutiún reclama a la OSCE
El 25 de septiembre la FRA-Tashnagtsutiún a través de su parlamentario Aghván Vartanian reclamó a la OSCE mayor compromiso en el cruento conflicto. "Hay dos maneras de resolver esta guerra. Una de ellas es a través de oponer a la fuerza otra fuerza mayor, cosa que nuestro ejército está en condiciones de hacer. La segunda manera y estoy convencido que es la conveniente, que los países que conforman el Grupo de Minsk de la OSCE trabajen para al menos reducir la tensión en primera instancia y terminar con la instigación a la violencia que hace el enemigo. De ese modo podríamos también evitar la muerte de los civiles.
El Grupo de Minsk se expidió mediante un comunicado donde condenó los ataques y las bajas a "cada lado de la frontera internacional y la línea de contacto". Pero evitó culpar a Bakú por el asesinato de las tres mujeres armenias, sólo arengó a las partes en pugna a que se abstengan de atacar a civiles. Señaló además que la OSCE no podría determinar cómo se originó la violencia, en una nueva muestra de "neutralidad" que a nada conduce y que sólo abre la puerta a más violencia azerí.