Con el rechazo del proyecto proazerí Karabagh obtuvo una victoria a medias

Ereván (Fuentes diversas).- Finalmente, luego de muchas especulaciones, el Consejo de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE) votó el martes 26 de enero dos proyectos de resoluciones aprobadas por las comisiones permanentes de Asuntos Políticos y de Asuntos Sociales y Salud con diferentes exigencias hacia Armenia y Artsaj.

El primero de los proyectos reclamaba la restauración inmediata e incondicional de la "plena soberanía" de Azerbaidján por parte de Armenia y Nagorno Karabagh, restituyendo además los distritos adyacentes "ocupados". Esta presentación sobre la cual Bakú tenía cifradas todas sus esperanzas fue rechazada luego de un arduo debate parlamentario.

La propuesta de resolución había sido presentada por el británico Robert Walter, bien conocido por su firme apoyo al déspota gobierno azerí. Sin embargo, los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE que representan a Estados Unidos Francia y Rusia, habían advertido en los días previos al tratamiento de los proyectos, que adoptar una resolución similar dinamitaría el proceso de paz en curso.

El segundo proyecto que sí resultó aprobado se refería a la "privación deliberada" del agua que fluye del reservorio de Sarsang ubicado en Mardakert y de acuerdo a Azerbaidján sus agricultores se ven privados de la utilización del líquido elemento.

La resolución califica de "agresión ambiental" al supuesto bloqueo armenio y reclama "el retiro inmediato de las fuerzas armadas armenias de la región". Lo curioso del caso es que Milica Markovic, el parlamentario bosnio autor del proyecto, no conoce Armenia, Karabagh ni el depósito de Sarsang. Al respecto, Shavarsh Kocharian, viceministro de Relaciones exteriores armenio, dijo que la resolución de Markovic "vierte el agua en el molino de la propaganda azerí, dirigida a socavar las tratativas de paz".