Cristina Papazian y su libro sobre la lectura de la borra del café: “Me gusta honrar a mis antepasados”
Cristina Inés Papazian, docente y consultora psicológica, publicó recientemente su nuevo libro “Borra del café: lectura e interpretación de signos” a través de la Editorial Dunken, en el que expone sus años de investigación y de experiencia en la lectura de formas y figuras dentro de las tazas de esta bebida.
En diálogo con el Diario ARMENIA la profesional develó distintos detalles de la publicación y de su trabajo como intérprete de estas imágenes.
“La idea de investigar una nueva perspectiva sobre la lectura de la borra del café surge en mí cuando encontré que, algunos recursos terapéuticos que utilizaba como Counselor en mis entrevistas en consultorio tenían un sustento en el valor simbólico”, destacó sobre la publicación.
En este sentido, en relación a los aspectos de la personalidad que esta práctica podía mostrar, agregó: “Quien se entrena de este modo será más preciso a la hora de poder indicarle al consultante que está transitando bloqueos o que está sujeto a creencias y mandatos limitantes que pueden estar alterando el ansiado rumbo de su desarrollo personal o del logro de objetivos”.
En tanto, sobre el mito y las certezas de estas imágenes, Papazian destaca que ambos lados son compatibles: “El mito nos indica que en esta práctica ancestral hay algunas respuestas más o menos certeras sobre aspectos de la vida y del conflicto relacionados con lo puramente humano. Las certezas están dadas por aceptar situaciones que me son propias, de las cuales debo responsabilizarme para transformarlas”.
Papazian, quien lee la borra del café desde pequeña, comenzó a enseñar la práctica desde hace dos años, cuando sus investigaciones le dieron las seguridades necesarias. De esta forma realiza diferentes talleres de exploración de símbolos y cursos que aportan las características de un buen intérprete.
“Me gusta honrar a mis antepasados, que cuando leían la borra del café oficiaban de acompañantes motivacionales. Sin tener estudios de psicología conocían mucho del ser humano y podían, en ocasiones, enderezar nuestros pensamientos y sentimientos. Nos ayudaban a repensar nuestros deseos y conductas, tal como hoy nos es accesible hacerlo en un consultorio”, concluyó Papazian, quien realizó la presentación de su libro recientemente.
