El libreto para tomar Artsaj por la fuerza se escribió en Najichevan hace un siglo

10 de octubre de 2023

La política genocida azerí lleva un siglo buscando “morder” cada vez más territorio de Armenia, apelando a cualquier instrumento para destruirla, siguiendo la política armenófoba de los turcos. 

Con solo leer a la pasada las noticias que llegaron de Artsaj y de Armenia en las últimas semanas, se observa una asombrosa semejanza entre la limpieza étnica que hoy tiene lugar en Artsaj, con la política de hostigamiento extremo y limpieza étnica que efectivamente se produjo en Najicheván entre 1918 y 1921.

En ese momento no estaba aún tipificado el delito de limpieza étnica. Habría que esperar hasta la década del 90 con la desintegración de la exYugoslavia, para que el mundo observara con incredulidad las persecuciones contra los bosnios musulmanes por parte de los serbo-bosnios y las definiera como “depuración étnica” o “limpieza étnica”.

Tampoco existía entonces el término genocidio. Fue el jurista judeo-polaco Raphael Lemkin quien desarrolló en la década del 30 del siglo pasado el concepto de genocidio,y lo definió como tal en 1943 en referencia al Holocausto judío. Para eso tomó como antecedente las matanzas de armenios a manos de los turcos durante la Primera Guerra Mundial, con un saldo de 1,5 millones de personas asesinadas.

ADN racista y genocida

Desde su nacimiento como Estado en mayo de 1918, Azerbaiyán montó un discurso racista contra los armenios y construyó al enemigo para justificar su ambición expansionista y la reescritura de la historia.

En momentos en que los armenios de todo el mundo somos testigos de un nuevo genocidio, transmitido en vivo por las redes sociales y los medios de comunicación, la historia se repite con un mismo modus operandi por parte de Azerbaiyán.

Se trata primero de instalar la idea de que hay un conflicto territorial, luego atacar indiscriminadamente -siempre con asistencia militar y logística de parte de Turquía- saquear, bombardear a la población civil y forzar su salida del lugar. Después argumentar que los armenios simplemente “se fueron”. Eso se llama limpieza étnica, un delito de lesa humanidad que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) considera una forma de genocidio.

Cualquiera que observe un mapa de Cáucaso sur no comprenderá muy bien cómo es que Najicheván pertenece a Azerbaiyán, pero Syunik es territorio armenio y al este Artsaj (Nagorno Karabaj) es un territorio en disputa con totalidad de población armenia pero en un marco jurídico aceptado internacionalmente como región autónoma de Azerbaiyán.

La respuesta es muy simple. Todo eso, Najicheván, Syunik y Artsaj, pertenecieron históricamente y por miles de años a Armenia, lo mismo que la provincia de Kars, que Turquía negoció con los bolcheviques en 1921 y obtuvo en su afán expansionista. Y lo mismo que cientos de miles de kilómetros cuadrados en lo que hoy es el este de Turquía, territorios usurpados, luego de genocidio cuando sus propietarios originales fueron asesinados.

Un poco de historia

Ya en el siglo I antes de Cristo Najicheván formaba parte de Vaspuragán, la octava provincia del Reino. Durante centurias Najicheván fue codiciada por las potencias de la región, al punto que en 1604, en el marco de una orden emitirá por el Shah AbbásI, la principal ciudad de la región –Jughá– fue saqueada y quemada y los casi 300.000 habitantes relocalizados en otras ciudades de Persia.

A través de diferentes divisiones administrativas, a lo largo de gran parte del siglo XIX Najicheván formó parte de khanato de Ereván en 1928 y más tarde, en 1840 de la Gobernación de Tiflís, y nuevamente en la Gobernación de Ereván, para pasar en 1867 a depender de Sharur-Daralagyaz (Vayots Dzor).

En su monumental trabajo “Nakhijevan of 1918-1920 in Papers of the U.S. Department of State and of the National Archives of Armenia”, la investigadora Gayané Makhmourian sostiene: “Cabe señalar que el gobierno del zar ruso nunca lo ha subordinado a la provincia del Caspio, Shemakha, y más tarde a las gobernaciones de Bakú o Elizavetpol”.

Durante el período independente 1918-1920 Najicheván formó parte del Estado armenio. Las cosas se complicaron con el surgimiento del nacionalismo turco liderado por Kemal Ataturk.

La Guerra de Araks

Meses después de la independencia armenia, en noviembre de 1918 los azeríes proclamaron la independencia de la República de Araks, bajo la conducción de Japhar-Kouli Khan y la velada protección de los británicos, interesados en ganar puntos como socios estratégicos de Azerbaiyán por el petróleo de Bakú y la cuenca del Caspio.

La República de Araks incluía los distritos de Najicheván y Ordubad, ambos pertenecientes a la provincia de Ereván y asignados a Armenia por el Comisionado en Jefe británico para el Cáucaso Sur, tras la Primera Guerra Mundial.

El objetivo de los azeríes, entonces, era fortalecer su posición en el sudoeste de Armenia e intentar unir ese territorio con Azerbaiyán, tomando previamente Syunik al sur de la nueva República de Armenia y luego Artsaj.

Pero el gobierno de Armenia no reconoció a este Estado y envió tropas para recuperarlo. Logró el objetivo en junio de 1919, aunque en los meses siguientes continuó sometido al asedio de los enemigos. En abril de ese año el gobierno de Armenia había decidió dividir el territorio en tres provincias: Goghtn, con cabecera en Akulís, Najicheván en torno a la ciudad homónima, y Sharur con centro en Pash-Norashén.

Las tropas de Azerbaiyán, asistidas por oficiales turcos, iniciaron una invasión, que incluía el financiamiento de una insurrección popular, que a fines de julio puso a los armenios en una posición de extrema debilidad. Todas las vías de comunicación y los caminos de montaña entre Goghtn y Zankezur, estaban tomados por fuerzas turco-azeríes, impidiendo cualquier vía de escape. En agosto de 1919, la perspectiva de los armenios de Najicheván era dramática.

“La situación es indescriptiblemente difícil. El hambre, la falta de municiones y comunicación ha creado una situación imposible. Es imposible escapar yendo a otro lado, ya que todos los caminos están en manos de los tártaros (azeríes). Esperamos su respuesta, nuestros días están contados, es imposible resistir por más de 10-15 días. Dénnos instrucciones precisas y dénse prisa para rescatar a Goghtn”, señaló el comisionado del distrito, Ashot Melik-Musyan en una carta desesperada, enviada al gobierno central.

El 6 de agosto, después de 10 días de resistencia, la ciudad de Akulís cayó en manos azeríes. La gente huyó donde pudo, casi toda la población de la cercana Jughá huyó a Irán.

La llegada de Nshteh

En un intento por recuperar la iniciativa el gobierno de Armenia decidió enviar a Karekín Nshtéh a Zankezur al frente de 180 combatientes, para defender Syunik y Najicheván, y lo designó comandante de las fuerzas armadas unificadas de Kapan, Kenvaz y Goghtn.

La resistencia duró por cuatro meses, pero finalmente con pocos hombres y pertrechos, y ante la imposibilidad de recibir ayuda desde el gobierno central, Nshteh debió optar entre defender Syunik o los poblados que quedaban con población armenia de Najicheván.

En el medio, la población armenia de Najicheván pasó de varios cientos de miles a unos pocos miles de pobladores. La semejanza con la situación de Artsaj, no puede ser más elocuente.

La mano de los soviéticos

Entrado el año 1920 y cuando el proceso de sovietización de Azerbaiyán ya estaba avanzado y las tropas bolcheviques acechaban Armenia, en julio de ese año el 11° Ejército Rojo Soviético asignado al Cáucaso, ocupó Najichevány proclamó la República Socialista Soviética Autónoma de Najicheván, con lazos cercanos con la RSS de Azerbaiyán.

La decisión de atribuir a Azerbaiyán la región autónoma de Najicheván se tomó el 16 de marzo de 1921 en el marco del Tratado de Moscú, entre la República de Turquía kemalista y la Rusia Soviética de Lenín. El artículo III instituyó el distrito de Najicheván autónomo bajo “protectorado” de la República Socialista Soviética de Azerbaiyán.

En el mismo tratado por el artículo II Turquía cedió el puerto de Batum a la RSS de Georgia y recuperó la provincia de Kars (en verdad, la perdió Armenia).

El 13 de octubre de 1921 el Tratado de Kars, en su artículo V establece: “El Gobierno turco y los Gobiernos soviéticos de Armenia y Azerbaiyán acuerdan que la región de Nakhchivan, dentro de los límites especificados en el Anexo III del presente Tratado, constituye un territorio autónomo bajo la protección de Azerbaiyán”.

Claramente, en los papeles firmados no es un territorio soberano perteneciente a Azerbaiyán. Y la supuesta protección fue para todos menos para los armenios, como en Artsaj.

Carlos Boyadjian
Periodista

coboyadjian@yahoo.com.ar

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