El mensaje del Catholicós Aram I: "Armenia está rodeada de perpetradores de genocidios antiguos y nuevos"

09 de agosto de 2021

El Catholicós de la Gran Casa de Cilicia Aram I envió un mensaje a Nikol Pashinyan con motivo de su nombramiento como Primer Ministro de la República de Armenia el 9 de agosto.

En la carta, Aram I destacó que se trata de un "período crucial de la historia del pueblo armenio y de Armenia" ya que "los cimientos de la estadidad están en peligro" y "la decepción y la incertidumbre se han convertido en una parte dominante de la vida de los habitantes de Armenia y Artsaj".

El referente religioso recordó que "la guerra desencadenada contra Artsaj por las fuerzas conjuntas de Azerbaiyán y Turquía y las numerosas víctimas humanas causadas por ella, la ocupación de las tierras liberadas por la sangre de nuestros mártires, la demolición de monumentos religiosos y el desplazamiento de miles de familias han provocado profundas consecuencias, ira y desánimo entre nuestro pueblo". Es por eso que Aram I consideró que era "imposible pasar esta página amarga y sombría de nuestra historia moderna sin rendir cuentas. Hay preguntas que necesitan respuesta. Hay incertidumbres que deben aclararse". Puntualmente, Aram I reclamó "que la Asamblea Nacional recién elegida dé una importancia prioritaria al establecimiento de una comisión que involucre a todas las facciones, para que pueda examinar de manera integral todos los temas relacionados con la guerra y entregar un informe público a nuestro pueblo", una propuesta que por el momento fue rechazada por el partido oficialista de Nikol Pashinyan, que cuenta con mayoría absoluta en el Parlamento.

Más adelante, Aram I pidió la "unidad interna de nuestro pueblo": "Es necesario que la cultura política malsana y las tensiones políticas internas que se desarrollaron durante la campaña electoral den paso a críticas saludables y constructivas entre gobierno y oposición".

El Catholicós planteó que "hoy Artsaj está herida". "Su dolor es el dolor de todo nuestro pueblo. Nuestro compromiso colectivo con la independencia de Artsaj debe ser firme. El reconocimiento internacional de la independencia de Artsaj debería convertirse en una de las cuestiones prioritarias no solo para el Gobierno armenio, sino también para la diáspora. El potencial colectivo de nuestro pueblo debe ponerse al servicio del fortalecimiento de la independencia de Artsaj", sugirió Aram I. En ese sentido, consideró "vital" la cooperación entre Armenia, Artsaj y la diáspora.

"La guerra de Artsaj y la subsiguiente firma de un alto el fuego entre Armenia, Azerbaiyán y Rusia son en realidad un indicador de una nueva situación geopolítica en el Cáucaso. La peligrosa situación actual requiere que el Gobierno esté atento e inquebrantable para garantizar la seguridad y la integridad territorial de Armenia. La situación actual en una región repleta de acontecimientos peligrosos para Armenia también requiere determinación para decir 'no'. De hecho, a lo largo de su historia, Armenia, que fue la manzana de la discordia en la encrucijada de los intereses de los grandes imperios, sobrevivió, aunque a veces herida, gracias a su coraje colectivo para decir 'no'", continuó Aram I.

"Hoy, Armenia está rodeada de perpetradores de genocidios antiguos y nuevos que continúan con sus aspiraciones expansionistas hacia Armenia y Artsaj, ignorando sus obligaciones y disposiciones del derecho internacional y, por lo tanto, el Ejército armenio debe organizarse y ser más eficaz. También necesitamos poder ampliar nuestro círculo de amigos y socios estratégicos", propuso Aram I.

"Señor Primer Ministro, esperamos que tome en serio nuestras preocupaciones y pensamientos, que le fueron presentados brevemente, para que podamos llevar a nuestra patria hacia un futuro más brillante con esfuerzos colectivos y consistentes, con un espíritu prudente y responsable. Apelamos en oración al Señor para que las Repúblicas de Armenia y Artsaj sean inquebrantables y seguras, y le pedimos que le otorgue sabiduría y fuerza para cumplir con su difícil misión", finalizó su mensaje Aram I.

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