HOM: Madrinazgo desde el corazón

Hace muchos años que deseaba entrar en el programa de Madrinazgo de huérfanos de HOM. Hasta que en el 2016, se presento la oportunidad y realice mi pedido, por medio de la filial Rupina de Montevideo. Al hacerlo, y sinceramente hasta hoy no sé porque, pedí que si era posible fuera un huérfano de la guerra de los 4 días de abril de ese año.

A la semana recibo el formulario con los datos del niño asignado! Con gran alegría, Vartan (foto) me había sido asignado, el único hijo de Vrej Sargsyan, sargento que fue asesinado por las fuerzas azeríes el 4 de abril del 2016, justamente el último día de esa guerra de 4 días.

Siempre trato de profundizar en las cosas que hago, así que comencé a buscar a su mama Najshun en las redes, infructuosamente, luego con la dirección y los datos, una amiga me envió el programa de TV1 de Armenia durante el cual le hacían un reportaje a la familia del héroe. Esa fue mi primera imagen de Vartan, su madre y sus abuelos paternos.

Desde ese momento, supe que no tendría que ser solo un contacto económico, sino más cercano y allí entro en mis planes, comunicarme y porque no,   conocerlo personalmente.

Llamé por teléfono, me atendió el abuelo muy contento, hablé con la mama y desde ese momento empezó un contacto semanal por las redes, mas algunas llamadas telefónicas.

Fui acompañando sus inquietudes, sus necesidades, sus “fiebres” y sus alegrías. Vartán cumplió en marzo 4 años y en setiembre empezaría el jardín. Quería viajar y acompañarlo en esa instancia.

Viajar a Armenia tenía varios objetivos, el primero era ese. Indescriptible fue la emoción cuando llegue a Pokr Masrig, conocí personalmente a Vartán, a Najshun su hermosa mama, y a sus abuelos paternos, a su tío y tía, primos, su entorno de campo, su vida, su alegre búsqueda de huevos que ponían las gallinas por el campo. Fueron días hermosos, también para conocer otras realidades que quedan ocultas ante el turismo convencional.

Lo acompañe a su escuela, en periodo de adaptación, con su mama y su abuela. En el colegio de Pokr Masrig, una de las salas lleva el nombre del sargento héroe Vrej Sargsyan y las autoridades del mismo desean que la institución que tiene número pero no nombre, lleve el nombre de él.

Debo agradecer al programa de madrinazgo de HOM que me permitió acceder a esta experiencia invaluable que se prolongara toda mi vida. Obviamente estos hechos, marcan un antes y un después, el altar realizado en su casa “Vrejin seniague” que lo evoca en todo momento, y también en el colegio del pueblo, enseña el valor que se le asigna a quien entregó la vida peleando por la patria.

Ahora Vartan, juega, construye, su mirada es algo triste, pero su risa es inolvidablemente tierna, sus juegos van construyendo su vida diaria y porque no su futuro. Y yo estoy Feliz de poder contribuir, modestamente a su crecimiento y bienestar. Es posible hacerlo!

Ana María Mahseredjian