La declaración del Consejo Central de Causa Armenia de la FRA-Tashnagtsutiún sobre las declaraciones infundadas del Primer Ministro de la República de Armenia

30 de enero de 2022

En una entrevista realizada el 24 de enero de 2022, el Primer Ministro de la República de Armenia hizo acusaciones que, por un lado, distorsionan los hechos históricos, y por el otro, repite casi idénticamente los argumentos de Turquía y de Azerbaiyán contra las cuales la República de Armenia y el Consejo Nacional Armenio  luchó durante mucho tiempo. Es extremadamente doloroso escuchar la repetición de las tesis hostiles por parte del jefe del poder ejecutivo de Armenia.

Entre las muchas afirmaciones, Pashinyan dijo que "la República de Armenia nunca siguió una política de defensa de la Causa Armenia" y consideró que el proceso de reconocimiento internacional del Genocidio Armenio es principalmente el resultado de las actividades de la Diáspora.

Al decir Hai Tad (Causa Armenia), Pashinyan probablemente se refiere al reclamo del Genocidio Armenio, olvidando deliberadamente el hecho de que en 1921 El Tratado de Kars, que es nulo desde el punto de vista del Derecho Internacional, aún no ha sido aceptado por la República de Armenia como base jurídica de la frontera entre Armenia y Turquía. La declaración realizada por el expresidente de la República Serzh Sargsyan el 10 de octubre de 2009 así lo demuestra: "La cuestión de las fronteras entre Armenia y Turquía debe resolverse de conformidad con el Derecho Internacional. Los protocolos no dicen nada más que eso”. Además, según la decisión del 12 de enero de 2010 de la Corte Constitucional de la República de Armenia sobre la constitucionalidad de los Protocolos de Zúrich, la frontera entre Armenia y Turquía está marcada como "frontera de facto".

La Declaración Pan-Armenia sobre el Centenario del Genocidio Armenio de  presentada en Tsitsernakaberd el 29 de enero de 2015 emitida por la Comisión Estatal que coordina los eventos dedicados al centenario del Genocidio Armenio, sigue siendo un documento nacional único sobre las circunstancias que rodearon el Genocidio Armenio y qué hacer a continuación.

Cabe señalar, también, que si el proceso de reconocimiento internacional del Genocidio Armenio fue principalmente actividad de las organizaciones de la Diáspora, la efectividad de esa actividad se multiplicó cuando las autoridades de ese momento de la República de Armenia apoyaron esa causa  de conformidad con el compromiso asumido por la Declaración de Independencia de Armenia adoptada el 23 de agosto de 1990.

En cuanto a las constantes referencias hechas por estas autoridades armenias al plan de acción del gobierno con respecto al reconocimiento internacional del Genocidio Armenio, cabe señalar que el programa de Gobierno de la República de Armenia 2021-2026 menciona que “El reconocimiento internacional del Genocidio le servirá al gobierno no para aumentar las tensiones regionales, sino, por el contrario, para distender la región”. Surge la pregunta: ¿cómo es posible combinar el reconocimiento internacional del Genocidio con el desarrollo de las relaciones con Turquía? También cabe señalar que el reconocimiento internacional del Genocidio no se presenta en el programa de gobierno como un proceso, lo que habla de sacar el proceso de reconocimiento de la agenda de política exterior de la República de Armenia.

El Primer Ministro de Armenia no dudó en hacer declaraciones muy peligrosas sobre el tema de Artsaj.

Lamentamos que el Primer Ministro de Armenia esté tan poco preparado, que no sepa o distorsione deliberadamente la relación entre el Derecho a la autodeterminación y el principio de integridad territorial en el Derecho Internacional. La controversia sobre la relación entre el derecho a la autodeterminación y el principio de integridad territorial fue aclarada aún más por la Corte Internacional de Justicia sobre el cumplimiento unilateral de Kosovo de su independencia conforme al Derecho Internacional por resolución consultiva de 22 de julio de 2010. Sin entrar en los pliegues jurídico-políticos de dicha decisión, mencionemos simplemente que la Corte se limitó a señalar que  “el campo de aplicación del principio de integridad territorial se circunscribe al ámbito de las relaciones entre los Estados reconocidos”. En conclusión, la Corte aceptó que el Derecho Internacional no prohíbe las declaraciones unilaterales de independencia.

Por lo tanto, el principio de integridad territorial y el derecho a la libre determinación no pueden oponerse entre sí, y la cuestión de la integridad territorial entre la República de Artsaj y la República de Azerbaiyán no puede plantearse en absoluto porque, como la Corte Internacional de Justicia resolvió, el principio de integridad territorial puede ser aplicado en las relaciones.

Así, en lugar de aprovechar las circunstancias objetivas que fortalecen la posición de la parte armenia en las relaciones con Turquía y Azerbaiyán, las autoridades armenias, incapaces de hacerlo, cedieron por completo a la vergonzosa repetición de las tesis azerí-turcas y se encontraron con las bien conocidas condiciones previas turcas.

La estructura mundial de la FRA-Tashnagtsutiún, independientemente de las posiciones derrotistas y vergonzosas de las autoridades armenias, continúa defendiendo los derechos de nuestro pueblo con la confianza de que la protección de esos derechos no puede estar condicionada por la existencia de autoridades transitorias e incompetentes.

Consejo Central de la Oficina de Causa Armenia Mundial
25.01․2022  

Compartir: