¿Marcha lenta hacia la supresión de los medios?
Comienza con las cosas pequeñas. Una decisión aquí, una regulación allí, y cuando uno se da cuenta de lo sucedido, ya es demasiado tarde para invertir la tendencia.
Los medios de comunicación fueron informados que los periodistas ya no tendrán acceso físico a las sesiones del ayuntamiento de Ereván.
Esta decisión se produce después del enfrentamiento de la semana pasada entre los miembros de la fracción opositora Yerkir Dziraní y el oficialista Partido republicano.
"El periodismo es lo que mantiene la democracia. Es la fuerza del cambio social progresivo".
El incidente ocurrió cuando dos ediles mujeres de Yerkir Dziraní intentaron mostrar al alcalde Darón Markarian unas jarras con aguas servidas para poner de manifiesto las preocupaciones de los residentes de Nubarashén, un suburbio de la ciudad capital armenia. Las aguas residuales de la prisión de Nubarashén se habían filtrado por mucho tiempo en las calles del distrito, causando preocupación y enfermedades a los residentes del área.
Las mujeres fueron confrontadas por un grupo de hombres del oficialismo que intentó evitar que llegaran al alcalde y, en la lucha cuerpo a cuerpo subsiguiente, varios de ellos atacaron físicamente a la concejala Marina Khachatrian.
El portavoz del alcalde, Arthur Gevorgian, dijo más tarde que en adelante los periodistas solo podrán seguir las sesiones del consejo en una sala separada a través de monitores. Según Azatutyun.am, Gevorgian aseguró que la decisión no debería verse como un impedimento para el trabajo de la prensa, sin embargo, agregó que la transmisión en vivo de las sesiones podría suspenderse si alguno de los concejales actuara de manera tal que se considerara "vandálica".
A principios de este mes, el primer ministro armenio, Karén Karapetian, también decidió prohibir a los periodistas las sesiones del gobierno. Además, a los miembros del gabinete de gobierno se les restringiría la posibilidad de hablar con los periodistas sin el permiso previo del premier. El ministro de Justicia, David Harutyunyan, señaló que todos los gobiernos del mundo celebran sus reuniones a puertas cerradas. Dijo que para garantizar la transparencia, cuando haya cuestiones de importancia, sería responsabilidad del primer ministro informar al público sobre dichos asuntos.
El 28 de enero, Marianna Grigoryan, editora de MediaLab.am, recibió amenazas luego de la publicación de una caricatura política que mostraba al ministro de Defensa, Vikén Sarkissian, quien según algunos informes de prensa había gastado más de quince mil dólares en flores. La viñeta muestra al ministro de Defensa parado frente a un ramo de flores con un veterano soldado con una pierna amputada detrás de él. Un coronel del ejército tiende un solo calcetín y le pregunta al veterano: "¿Es suficiente para ti, soldado?"
El usuario de Facebook que supuestamente amenazó a Grigoryan es el oficial retirado del ejército Haik Berman Ohanian. Según Grigoryan, él le envió mensajes privados advirtiéndola del destino de los doce empleados de Charlie Hebdo que fueron asesinados y mencionando a su pequeña hija, luego de lo cual informó el incidente a la policía y pidió protección para ella y su familia. El acusado dijo a los investigadores que estaba molesto porque Grigoryan había publicado una imagen humillante y afirmó que no había amenazado con dañarla. No se presentaron cargos relacionados con las amenazas.
El papel de los medios no puede ser menoscabado. Suprimir el libre flujo de información no es de interés público. Lo que es de interés público es que la sociedad vea y lea cómo los que ocupan puestos de poder actúan de acuerdo con las leyes estatales. El papel de los medios es garantizar que los funcionarios electos rindan cuentas a quienes los han sido elegidos para servir. Al restringir las libertades de los medios, la autoridad gobernante está socavando uno de los pilares más importantes de la democracia. El derecho de informar, publicar e informar lo que es de interés público es el trabajo de los medios. Intentar controlar el mensaje es una pendiente resbaladiza que esta frágil democracia armenia no puede permitirse.
María Titizian
evnreport.com