Paso a paso, como fue el proceso legal de independencia de Artsaj

31 de agosto de 2023

La República de Artsaj (Nagorno Karabaj) declaró su independencia el 2 de septiembre de 1991, siguiendo todo el protocolo fijado por las normas y leyes vigentes en la Unión Soviética. Pero la respuesta de Azerbaiyán fue la guerra.

La actual crisis humanitaria desatada en Artsaj por la política genocida de Azerbaiyán contra la población nativa de raíz armenia, tiene notorias semejanzas con los orígenes del movimiento Karabaj, que emergió en febrero de 1988 y que terminó en la declaración de la independencia del 2 de septiembre de 1991.

El hilo conductor entre ambos sucesos se fundamenta hoy como hace tres décadas -en verdad desde hace más de un siglo- en el sentimiento de los artsajtsí, que tienen muy claro que es imposible la convivencia pacífica con los azeríes, no importan las épocas ni las circunstancias.

Esto responde, básicamente, a que éstos últimos están movidos desde hace mucho tiempo por conceptos y percepciones armenófobas muy arraigadas en el inconsciente colectivo, alimentados desde ya por las élites dominantes en Bakú desde principios del siglo XX, como mínimo, sino desde antes.

Si después de 26 años de vida pacífica -con privaciones pero pacífica- en la autoproclamada República de Artsaj (Nagorno Karabaj), tras la primera guerra de Artsaj (1991-1994) ganada por los armenios, muchos pensaron que los tiempos habían cambiado y se podría entonces convivir con los vecinos musulmanes del este, pues les tenemos una mala noticia.

No sólo que nada cambió, sino que el racismo y la xenofobia que inculca con su retórica furibunda y sus acciones criminales el autoritario presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, llevaron la situación al extremo de generar deliberadamente un nuevo genocidio por hambruna contra población armenia de Artsaj, en pleno siglo XX, a la vista de todo el mundo y contrariando los documentos oficiales firmados por él mismo, tras finalizar la guerra de los 44 días de fines de 2020.

La desintegración de la URSS
Los hechos que tuvieron lugar en el Cáucaso Sur en las postrimerías de la Unión Soviética reflejan que los líderes políticos armenios de entonces tenían claro que el camino de la paz era la autodeterminación y el vínculo estrecho con Armenia, sin nada que ver con el falso internacionalismo planteado por los dirigentes de la Unión Soviética entre 1921 y 1923 de buscar la convivencia pacífica entre los dos pueblos con la falacia de declarar regiones autónomas a Najicheván y Nagorno Karabaj.

El proceso de emancipación fue lento y con obstáculos, pero ajustado a derecho. La primera manifestación masiva en Stepanakert, la capital del Oblast Autónomo de Nagorno Karabaj (NKAO), a favor de la separación de la República Socialista Soviética de Azerbaiyán y su reunificación con la República Socialista Soviética de Armenia tuvo lugar el 13 de febrero de 1988.

Lo que siguió fueron persecuciones masivas y progromos en Sumgait, Bakú, Kirovabad (actualmente Ganja, y Gandzak en la Armenia histórica) y Shamkhor. La mecha estaba encendida y también la convicción de los artsajtsí de que el camino de la independencia era ineludible y además, que el enfrentamiento bélico era inevitable.

Pese a ello, los líderes del Movimiento Karabaj, que se formó por entonces, impulsaron la secesión por la vía legal, siguiendo el cuerpo legal y las normas que regían las relaciones entre las repúblicas y las regiones autónomas que integraban la Unión Soviética.

Gestiones y decisión
El 20 de febrero de 1988, en una sesión extraordinaria del Consejo de la República Autónoma (soviética) de Nagorno-Karabaj los diputados del pueblo tomaron la decisión de apelar al Sóviet Supremo de la República Socialista Soviética de Azerbaiyán para la secesión, al tiempo que se solicitó la unificación al Sóviet Supremo de la República Socialista Soviética de Armenia y al Sóviet Supremo de la URSS se pidió que aprobara esta ley, basándose en las normas jurídicas existentes y en la prioridad de resolver disputas similares en la URSS.

Sin embargo, cada vez que se intentó el diálogo para resolver este tema, la respuesta fue una escalada de la violencia.

La legislación vigente en la URSS contemplaba la posibilidad de secesión por vía legal y es lo que buscaron los líderes de Artsaj. Se basaron en el “Reglamento que rige las cuestiones relativas a la secesión de una república unida de la URSS”, una ley del 3 de abril de 1990 que otorga a las autonomías nacionales el derecho a decidir independientemente su propio estatus jurídico, en caso de que una república soviética se secesionara de la URSS.

Aquí las fechas son muy importantes, porque precisamente el 30 de agosto de 1991 en sesión plenaria del Consejo Supremo de Azerbaiyán se aprobó la declaración sobre la recuperación de la independencia estatal de la República.

Fue justamente apelando a esa norma citada d la URSS que permitía a las provincias o regiones autónomas conservar el derecho a decidir independientemente la permanencia en la URSS, seguir a la república secesionista que la administraba hasta entonces o plantear su propio estatus jurídico mediante un referéndum.

Así, si una República Soviética decidiera separarse de la URSS y declararse independiente, un óblast autónomo dentro de esa república tenía el derecho de elegir su propio destino y es lo que hizo Artsaj.

Referéndum e independencia
Sólo tres días después de que Azerbaiyán declarara su secesión, el 2 de septiembre una sesión conjunta del Óblast Autónomo de Nagorno-Karabaj y el Consejo Regional de Shahumian, una región adyacente al noroeste del óblast proclamó la República de Nagorno-Karabaj dentro de las fronteras del Óblast Autónomo de Nagorno-Karabaj y la vecina región de Shahumian, reservándose además el derecho del pueblo a decidir a través de un referéndum la cuestión de la independencia.

El referéndum se convocó para el 10 de diciembre de ese año. Pero en el medio, en noviembre de 1991 el Soviet Supremo de Azerbaiyán, contrariamente a todas las normas legales, aprobó una ley que liquidaba el NKAR, que fue declarada inconstitucional por el Tribunal Constitucional de la URSS.

Esta medida –en lo que respecta al Óblast Autónomo– estaba dentro de los límites de la ley de secesión de la URSS, que otorgaba al pueblo del Óblast Autónomo el derecho a decidir su propio estatus legal estatal mediante referéndum, independientemente de la decisión de Azerbaiyán de secesionarse. El referéndum se celebró en diciembre de 1991, momento en el que una abrumadora mayoría del pueblo (99,98 por ciento) votó a favor de la independencia. En consecuencia, la declaración de independencia de Artsaj era válida y legal. Azerbaiyán no tenía derecho a la Óblast Autónoma de Nagorno-Karabaj porque decidió legalmente determinar su propio destino mediante un referéndum. El Óblast Autónomo de Nagorno-Karabaj nunca formó parte de un estado azerbaiyano y Azerbaiyán no tiene derechos territoriales sobre su territorio.

El 28 de diciembre de ese año se celebraron elecciones parlamentarias en la República de Nagorno Karabaj y se formó el primer gobierno, a cargo de Robert Kocharyan. Así empezó un proceso de reconstrucción que fue interrumpido en septiembre de 2020 por la agresión armada, en el medio de la pandemia de Covid-19, por la coalición integrada de Turquía, Azerbaiyán y terroristas traídos de Siria y Libia contra la población armenia de Artsaj.

Carlos Boyadjian

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