Tres soldados armenios murieron defendiendo su suelo patrio
Ereván (Fuentes diversas).- En la madrugada del jueves 19 de marzo tres soldados armenios murieron y otros cuatro recibieron heridas de distinta gravedad como consecuencia de un nuevo ataque azerí al norte de Artsaj. El intento de invasión enemigo fue resistido exitosamente por las fuerzas armenias que provocaron la muerte de al menos dos efectivos azerbaijanos.
De acuerdo a las informaciones proporcionadas por el Ejército de Defensa de Karabagh, las bajas armenias son los soldados Hagop Khachatrian, Eduard Hayrapetian y Arshag Harutiunian, quienes murieron en sus puestos de combate rechazando el ataque de un grupo comando azerí. La rápida reacción de la avanzada militar armenio frustró el avance enemigo quien en su huida dejó abandonada gran cantidad de armamentos.
Al igual que en otras ocasiones el enemigo azerí intentó penetrar la línea de contacto entre Artsaj y Azerbaidján, pero luego de un feroz combate que duró más de dos horas, los atacantes fueron vencidos y debieron retornar a sus posiciones iniciales.
El ejército karabaghí publicó imágenes de cuatro lanzadores de granadas autopropulsadas, un rifle de asalto con una mira de visión nocturna y gran cantidad de municiones que quedaron abandonadas en el campo de batalla.
Si bien las primeras informaciones hablan de dos soldados azeríes muertos, fuentes oficiosas hablaban de entre siete a catorce soldados azeríes muertos en lo que supone el caso más grave de violación de la tregua en la zona de conflicto informado desde agosto.
Por su parte, el lado azerí se apresuró a negar las versiones armenias y contraatacó afirmando que sus tropas hirieron o mataron al menos a unos veinte soldados armenios como consecuencia de las "provocaciones" organizadas por las fuerzas karabaghíes. El comunicado oficial dado a conocer por el Ministerio de Defensa de Azerbaidján nada dice de las bajas sufridas por sus tropas.
Sin embargo, pudo saberse que el ministro de Defensa de Azerbaidján Zakir Hasanov visitó un hospital militar de Bakú y habló con los soldados heridos que reciben tratamiento allí. La oficina de prensa de la cartera militar aseguró que la presencia del funcionario estaba relacionada con un día festivo.
En Ereván, Tigrán Balayan, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, acusó a Azerbaidján de reavivar la tensión a lo largo de la "línea de contacto" en torno a Karabagh desafiando una vez más los esfuerzos de los mediadores del Grupo de Minsk de la OSCE que buscan afianzar el alto el fuego establecido en 1994 y que cada vez es más endeble.
Balayan sostuvo que Bakú deberá asumir la responsabilidad de las consecuencias que genere esta nueva escalada.
"La parte armenia está dispuesta a afrontar cualquier desarrollo de la situación", dijo el ministro de Defensa Seirán Ohanian a través de una declaración escrita. De todas maneras, Ohanian dejó entrever que no ve peligro de hostilidades a gran escala. Calificó las incursiones azeríes como "imprudentes" en el sentido militar, acusando a Bakú de ocultar sus bajas en combate para evitar una reacción violenta en el orden interno.
Ohanian visitó a los soldados heridos
Ereván (RFE/RL).- El ministro de Defensa Seirán Ohanian (foto) se reunió con los comandantes de las fuerzas armadas de Artsaj e inspeccionó el escenario de los últimos combates con las fuerzas azeríes. Ohanian se trasladó a Karabagh apenas dos días después de que tres soldados armenios murieran y otros cuatro resultaran heridos durante el ataque azerí registrado en el distrito de Martakert.
La declaración oficial consignó que el titular de la cartera de Defensa recorrió el lugar durante dos horas y se interiorizó acerca de los detalles de la acción militar. También estuvo en el hospital militar de Stepanakert, donde visitó a los soldados heridos en combate.
En su reunión posterior con los mandos del Ejército de Defensa, Ohanian analizó diversas cuestiones relacionadas con la prevención de nuevos ataques enemigos y la necesidad imperiosa de dar las respuestas adecuadas.
El Grupo de Minsk preocupado por la escalada
Moscú, (Interfax).- James Warlick, uno de los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE que intenta mediar en el extenso diferendo entre Armenia y Azerbaidján mostró preocupación por la nueva escalada de violencia en línea de contacto entre las partes en conflicto. “La reanudación de las hostilidades en Nagorno Karabagh es muy crítica y viola el alto el fuego establecido. Mientras unos se culpan a otros, las acciones socavan el proceso de paz”, manifestó el estadounidense.
Bakú acusó a Armenia de haber infringido la tregua establecida durante 82 ocasiones en diversas regiones del área en disputa. También Armenia dio cuenta de más de un centenar de ataques azeríes con morteros y ametralladoras de gran calibre.