“Un huequito de luz”: Alin Demirdjian cuenta sobre el voluntariado para niños y niñas de Artsaj

27 de octubre de 2020

En la guerra perdemos TODOS. Pero el amor vence al odio, siempre. Siempre hay un "lado B", un huequito de luz entre tanta oscuridad. Y los niños son esa luz, son las sonrisas que perdimos desde el pasado 27 de septiembre. Ellos son el amor, los que nos enseñan a seguir; ellos son el por qué seguir.

A todos los armenios del mundo los ataques de Azerbaiyán y Turquía contra nuestras amadas tierras y nuestros hermanos de Artsaj nos duele en todo el cuerpo, en todo nuestro ser. Nos duele en todo lo que podemos expresar y en lo que no también. Pero estando en Armenia esta realidad también te atraviesa en todo lo cotidiano, a toda hora y en cada rincón. Es la realidad que atraviesa y lastima a cada uno de mis vecinos, de mis amigos, de mis parientes y de mis maestros. Pero así como nos lastima, también nos hace más fuertes. Sentir el grito de todos los armenios en cada rincón del planeta nos hace sentir a todos el calor de nuestra Gran Familia.

Por eso estando acá en Armenia, más precisamente en la bella ciudad de Gyumrí, desde que empezó esta guerra que, como bien dijo el actor Hovik Keuchkerian "es más que una guerra", me pregunto al igual que muchos acá: ¿qué puedo hacer desde mi lugar? ¿Cómo puedo aportar desde mi trinchera: la música? Porque cada uno de nosotros puede aportar para que nuestro pueblo salga adelante y siga resistiendo como lo hizo siempre a lo largo de los siglos. Cada uno puede poner su granito de arena desde su lugar, desde su conocimiento y experiencia, con amor y convicción. Entonces entendí que la cultura; el arte y la música también son nuestras armas…¡siempre lo fueron!

Y como ya son miles las familias desplazadas que llegan desde Artsaj a refugiarse en distintas partes de Armenia ya que sus hogares están siendo bombardeados, hay mucho trabajo por hacer. Es necesaria mucha ayuda humanitaria, por supuesto mucho dinero, pero también mucho AMOR. Tenemos la necesidad de abrazarnos desde el amor los unos con los otros, y ¿qué mejor que la MÚSICA como medio para concretar ese abrazo?

El pasado 24 de octubre me convocaron acá en Gyumrí desde algunos Centros que trabajan con niños y adolescentes locales y que ahora también integran de manera maravillosa a los recién llegados desde Artsaj. Di un primer concierto interactivo en KASA Gyumrí para niños de hasta 12 años. Chicos de Gyumrí y de Artsaj que de a poco se hacen amiguitos y que ni los barbijos pueden esconder sus brillantes sonrisas y sus ganas de cantar bien fuerte. Nos presentamos, cantamos en armenio y en español, jugamos y festejamos el cumple de Arakel que cumpió 9 años y está acá momentáneamente con sus dos hermanos. Hasta le cantamos el feliz cumpleaños a Arakel en español…¡los chicos aprenden muy rápido! Por supuesto, el deseo más grande es que él y todos los niños de Artsaj puedan volver a sus hogares muy, muy pronto.

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Es muy necesario que sigamos donando, lo que podamos, al @fondoarmenia. Todo granito de arena suma un montón porque es mucha la ayuda humanitaria que hace falta acá para el pueblo armenio de Artsaj 🙏❤. Ayer estuve cantando con estos bombonesss, algunos niños de #Gyumri y niños de #Artsaj que ahora se hacen amiguitos ya que están momentáneamente viviendo acá porque sus hogares están siendo bombardeados. Cantamos en armenio y también en español😅. Hasta le cantaron el Feliz Cumpleaños a Arakel en español...aprenden muy rápido!!💪😍 Todos deseamos bien fuerte que los niños nunca dejen de sonreír y que puedan volver a su tierra lo antes posible! Gracias por apoyar nuestra causa y por seguir colaborando!!✊✨ . Thanks @kasa_guesthouse_gyumri and @impacthubyerevan for the big job you are doing!❤ . . #PeaceForArmenians #PazEnArtsaj #PazParaLosArmenios #NoToGenocide #ReconocimientoArtsaj #RecognizeArtsakh

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La idea es realizar estos encuentros al menos una vez por semana en KASA Gyumrí y, además este sábado también me invitaron del centro Gyumrí Youth Initiative Center para hacer actividades musicales junto a adolescentes.

En Ereván, en Gyumrí y en toda Armenia hay muchos voluntarios ayudando y haciendo distintas actividades artísticas para niños y adolescentes de Artsaj. Cada uno desde su lugar. Dando y recibiendo. Interactuando, intercambiando e integrándonos los unos con los otros. Porque no se trata de "hacer algo por los niños". No se trata de ser héroes, sino hermanos. Se trata de hacer algo "entre todos" porque estamos todos juntos en esta, y todos juntos con mucho amor y manteniendo el deseo inquebrantable de querer vivir en paz vamos a vencer al odio. Volveremos a vivir en nuestras tierras en libertad.

Los invito a seguir donando al Fondo Armenia y a seguir aportando cada uno desde su trinchera para que los niños nunca dejen de sonreir.

Alin Demirdjian

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