Acusan a Azerbaidján de oponerse al aumento de observadores en Artsaj

Ereván (RFE/RL).- Armenia acusó a Azerbaidján el jueves 22 de febrero de incumplir un acuerdo previo para permitir que la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) desplegara más observadores del alto al fuego en la zona de conflicto de Nagorno Karabagh.

El compromiso había sido anunciado por el copresidente estadounidense, ruso y francés del Grupo de Minsk, luego del encuentro celebrado en Cracovia el 18 de enero entre los ministros de Relaciones Exteriores de ambas naciones involucradas en el diferendo.

“Ambos cancilleres acordaron en un principio el documento revisado por los copresidentes para ampliar la oficina del representante personal del presidente en ejercicio de la OSCE con miras a hacerlo lo antes posible”, reveló un comunicado emitido por los propios mediadores.  El representante ruso del grupo, Igor Popov, especificó más tarde que otros siete funcionarios se unirían a la misión de monitoreo ya existente.

En una reunión con un enviado de la Unión Europea, el ministro de Relaciones Exteriores de Armenia Edward Nalbandian comentó: “Cuando los representantes del grupo visitaron Bakú hace varios días, Azerbaidján volvió a negarse a cumplir esta ampliación de la misión de observadores”.

Si bien los funcionarios azeríes no formularon declaraciones públicas acerca del tema, Bakú se ha mostrado reacio a tomar esta y otras medidas de confianza mutua buscadas por los mediadores, argumentando que las mismas consolidarían el status quo actual. La parte armenia insiste, por el contrario, en reforzar el inestable régimen del cese al fuego como condición previa necesaria para llegar a una resolución pacífica del conflicto.

Los copresidentes, que visitaron Ereván, Bakú y Artsaj a principios de este mes, llamaron a las partes “a tomar medidas adicionales con el fin de reducir las tensiones” en la línea de contacto, teniendo en cuenta los acuerdos alcanzados entre los presidentes Serge Sarkissian e Ilham Aliev en su reunión de octubre de 2017 en Ginebra.