Armenia celebró el Día de la República en medio de la nueva invasión de Azerbaiyán y la posguerra de Artsaj
Armenia celebró el Día de la República el 28 de mayo en ocasión del 103º aniversario de la proclamación de la República de Armenia y la heroica batalla de Sardarabad, en medio de la actual invasión de Azerbaiyán desatada desde el 12 de mayo y la catástrofe humanitaria de la posguerra de Artsaj (Nagorno Karabaj).
El presidente Armen Sarkissian, el primer ministro interino Nikol Pashinyan y el presidente de la Asamblea Nacional Ararat Mirzoyan visitaron el monumento a Sardarabad y colocaron una ofrenda floral en homenaje a los héroes.
“La Primera República fue un acontecimiento significativo en la vida de nuestro pueblo, la restauración de un Estado independiente después de una larga lucha por la soberanía. Una vez más demostró que cuando estamos unidos, podemos ganar”, declaró Armen Sarkissian.
“Hoy nos encontramos en el umbral de la moralidad y la dignidad en Sardarabad, una batalla cuyo único resultado victorioso puede garantizar una condición de Estado fuerte y la perspectiva de desarrollo. Hoy necesitamos sentido común y sentido común, necesitamos aprender una nueva lección de la historia, que la patria como realidad solo puede existir en forma de un Estado independiente”, marcó el Presidente armenio.
“La condición de Estado independiente es la inviolabilidad e inviolabilidad de nuestras fronteras, nuestra capacidad para tomar decisiones, implementarlas, garantizar la seguridad, dictar la paz. No solo debemos ser capaces de ganar, sino también comprender en profundidad cómo afrontar esa victoria”, planteó Sarkissian, y enfatizó la necesidad de “ser capaces de analizar con seriedad las causas de nuestros fracasos, desde la Primera República hasta el presente, y trabajar para corregir nuestros propios errores, desarrollar una visión clara y programas de desarrollo”.
Por su parte, Pashinyan recordó que “en esos días de 1918, nuestro pueblo estaba en peligro de muerte” y “el desastre parecía inminente”. “Parecía que finalmente perderíamos el derecho a crear un Estado en nuestra tierra natal, a vivir en nuestra cuna. Sin embargo, bajo el poder abrumador del pueblo, liderado por el espíritu y la voluntad de Aram Manukian, los armenios pudieron detener el ataque del enemigo para establecer su derecho inalienable a un Estado soberano de una vez por todas en las heroicas batallas de Sardarabad, Bash-Aparan y Karakilisa”.
“En los momentos difíciles, el pueblo armenio siempre ha podido unirse, ser un puño, dirigir todas sus fuerzas por el bien de la defensa, por el bien de la soberanía y la condición de Estado. Estoy convencido de que hoy debemos actuar con el mismo espíritu, desde Ereván hasta las aldeas fronterizas como una sola familia en beneficio de garantizar la seguridad de nuestra amada patria”, señaló el Primer Ministro interino. “Nuestra soberanía e independencia no se pueden discutir”.
La opositora Alianza Armenia, compuesta por el expresidente Robert Kocharyan, la Federación Revolucionaria Armenia (FRA – Tashnagtsutiún) y el partido Reviviendo Armenia, emitió un comunicado en el que recordó que “hace exactamente 103 años, en duras batallas que duraron unos 10 días, los armenios derrotaron a los Ejércitos turcos”. “Ganamos en batallas desiguales y con la victoria demostramos no solo nuestro derecho a existir, sino también nuestro derecho a la estadidad. Siguiendo el ejemplo de quienes construyeron las victorias de 1918, debemos estar decididos por el bien de nuestro pueblo, por el bien de Armenia, por el bien de volver a enriquecer el derecho a una mayor existencia de Artsaj”, continuó el bloque. “Los agentes enemigos serán derrotados y continuaremos nuestro proceso creativo, coronándolo con nuevas victorias y nuevos ascensos”.