El Parlamento de Armenia designa a la nueva Defensora de los Derechos Humanos
El parlamento de Armenia designó este lunes a través de una votación a Kristine Grigoryan como la nueva defensora del pueblo, quien asumirá en su cargo el próximo 24 de febrero en reemplazo de Arman Tatoyan. La flamante ombudsman se había desempeñado como viceministra de Justicia hasta el pasado 20 de enero.
La abogada de 40 años, quien también había sido titular de la cartera de Justicia entre 2015 y 2018 fue nominada para el cargo por el partido de Contrato Civil encabezado por el primer ministro Nikol Pashinyan. La votación fue respaldada por 68 legisladores de los 107 totales, mientras que desde la oposición rechazaron la candidatura e intentaron boicotear la votación.
Durante el debate, Grigoryan evitó criticar las políticas de derechos humanos del oficialismo y evitó hacerse eco de las afirmaciones por parte de la oposición de que existen presos políticos en Armenia.
“Se le está dando el mandato de defender el régimen de Nikol Pashinyan, en lugar de los derechos humanos”, detalló Anna Mkrtchyan, diputada del bloque opositor Pativ Unem respecto a la funcionaria entrante. Por su parte, desde Contrato Civil rechazaron las críticas a la nueva ombudsman y arremetieron contra el defensor saliente, Arman Tatoyan, quien en el último tiempo ha sido crítico de la administración del primer ministro armenio.
El ex defensor del pueblo ha denunciado el retiro de las tropas armenias ordenado por Pashinyan tras la guerra de 2020 en Nagorno-Karabaj y acusó a las autoridades de socavar la independencia judicial y de intimidar a los grupos opositores que derrotaron al partido gobernante en las recientes elecciones locales.
También criticó las declaraciones del mandatario armenio antes de las últimas elecciones parlamentarias en las que se comprometía a “purgar” a la burocracia estatal y emprender “venganzas políticas” contra los funcionarios provinciales que apoyen a la oposición.
Un destacado funcionario del gobierno había respondido a estas afirmaciones en diciembre del año pasado acusando a Tatoyan de participar en actividades “contrarrevolucionarias” en apoyo de la oposición.
En este sentido, durante su discurso en el parlamento, Grigoryan aseguró que la oficina del defensor del pueblo “no debe ser percibida como un organismo alienado del Estado y que lucha contra el Estado” y ratificó que si era elegida lucharía por cambiar estos conceptos erróneos.