El partido de Nikol Pashinyan le quitó cargos a diputados opositores de la Asamblea Nacional de Armenia y mantiene su amenaza de destituirlos
El partido Contrato Civil del primer ministro Nikol Pashinyan le quitó los cargos a diputados opositores el 1º de julio en una sesión especial de la Asamblea Nacional, mientras que mantuvo la amenaza de destituir a quienes hayan participado de los más de dos meses de protestas contra el Gobierno.
El oficialismo removió de sus cargos al diputado de la Alianza Armenia y representante del Cuerpo Supremo de la Federación Revolucionaria Armenia (FRA – Tashnagtsutiún) Ishkhan Saghatelyan, ahora exvicepresidente de la Asamblea Nacional, y al exgobernador de Syunik y diputado de la Alianza Armenia, Vahe Hakobyan, ahora exjefe del Comité Permanente de Asuntos Económicos de la Asamblea Nacional.
Tras conocerse la noticia, el diputado Tadevos Avetisyan renunció como vicepresidente del Comité Permanente de Asuntos Laborales y Sociales y denunció que “las autoridades de turno están tratando de debilitar a toda costa la resistencia que se opone a su actual traición a la nación, están tratando de silenciar a las fuerzas políticas de oposición privándolas de cargos administrativos en la Asamblea Nacional”. Previamente, el diputado y exviceprimer ministro Armen Gevorgyan renunció a su cargo como presidente del Comité Permanente de Integración Regional y Euroasiática, mientras que el diputado Hayk Mamijanyan anunció su renuncia al cargo de vicepresidente del Comité Permanente de Relaciones Exteriores y Arturo Khachatryan renunció como vicepresidente de la Comisión Permanente de Asuntos Financieros y Presupuestarios.
Los bloques opositores Alianza Armenia y Tengo el Honor emitieron un comunicado en conjunto en el que aseguraron que “la situación es absurda” y que estas medidas se tomaron “para desviar la atención a la ciudadanía de los desafíos de seguridad existentes, el reconocimiento de una posible amenaza de guerra, el tema de Berdzor, las nuevas concesiones, y la no devolución a la patria a los prisioneros de guerra”.
“Desde el primer día habíamos manifestado que los cargos administrativos de la Asamblea Nacional no eran un fin en sí mismos para nosotros, son una herramienta de apoyo a la actividad opositora, que nace de la Constitución y del voto popular. Este comportamiento es un indicador de una dictadura estable, que no tiene precedentes, y por otro lado, la crisis política en Armenia se profundiza”, marcaron los bloques opositores.
“Con este comportamiento, las autoridades de turno confirman una vez más que se preocupan exclusivamente por sus cargos, están ocupadas en la persecución, privadas de cualquier oportunidad de enfrentar los desafíos que enfrenta el país, no tienen legitimidad, no representan los intereses de Armenia y Artsaj, y en estas condiciones la remoción es inevitable”.
El representante de la FRA – Tashnagtsutiún de Sudamérica, Hagop Tabakian, opinó días atrás que “la revolución de terciopelo de Nikol Pashinyan, tras fracasar con todas las promesas que le hizo al pueblo, tras quitarle el apoyo institucional a Artsaj, tras entregar porción por porción tierras armenias, está en la faz de perseguir políticamente a sus opositores, y eso llegó a la Asamblea. Veremos cómo siguen los pasos de el Primer Ministro, desde la represión en las calles a silenciar a quienes cuestionan sus políticas”.