La Cancillería armenia en el aniversario de la guerra de Artsaj: "Las continuas agresiones militares por Azerbaiyán contra Armenia y Artsaj socavan la estabilidad y la seguridad regionales"

27 de septiembre de 2022

La Cancillería de Armenia emitió un comunicado el 27 de septiembre en el segundo aniversario de la guerra de Artsaj (Nagorno Karabaj) desatada por Azerbaiyán y Turquía contra Artsaj y Armenia en 2020.

"Hace dos años, el 27 de septiembre, Azerbaiyán, violando abiertamente la Carta de la ONU y el Acta Final de Helsinki, desató una guerra a gran escala contra Nagorno Karabaj y su pueblo. Hoy, nuevamente inclinamos la cabeza y conmemoramos a los soldados caídos en la guerra de los 44 días, que lucharon para detener la amenaza existencial que enfrentan nuestros compatriotas. La guerra desatada por Azerbaiyán contra Nagorno Karabaj fue una manifestación criminal de la política estatal de Azerbaiyán de someter a los armenios de Artsaj a una limpieza étnica, privándolos del derecho a vivir y crear libremente y con seguridad en su patria histórica y, en consecuencia, resolver el problema de Nagorno Karabaj por la fuerza. Esto se evidencia tanto antes como durante la guerra, así como en el período de posguerra, por las incesantes declaraciones belicosas, intolerantes y de odio a los armenios de los principales líderes de Azerbaiyán", denunció Armenia.

"A lo largo de la guerra de 44 días, las fuerzas armadas de Azerbaiyán cometieron graves violaciones de los derechos humanos y humanitarios internacionales, crímenes de guerra y otros crímenes masivos, con ataques aéreos y con cohetes, incluido el uso de armas prohibidas, dirigidos deliberadamente contra la población civil, la infraestructura civil, asentamientos y monumentos culturales. Los militares y civiles armenios capturados fueron sometidos a tratos inhumanos y torturas, ejecuciones extrajudiciales. Muchos problemas humanitarios siguen sin resolverse. Azerbaiyán continúa reteniendo prisioneros de guerra armenios y civiles como rehenes, el destino de cientos de desaparecidos y desaparecidos por la fuerza como resultado de la primera guerra de Karabaj y de los 44 días sigue sin estar claro", advirtió la Cancillería armenia.

"Incluso hoy, la política consistente de destruir el patrimonio espiritual e histórico-cultural armenio y distorsionar la identidad continúa en los territorios que quedaron bajo el control de Azerbaiyán. La Corte Internacional de Justicia de la ONU dio su clara evaluación de estos crímenes, encontrando que en el marco de la Convención Internacional 'Sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial' existe un riesgo inmediato de daño irreparable a los derechos de los armenios. En este caso, la entrada sin trabas y la provisión de actividades de estructuras humanitarias internacionales relevantes en Nagorno Karabaj y sus alrededores es más que urgente. Inspirado por la respuesta inapropiada de la comunidad internacional a la agresión desatada contra el pueblo de Nagorno Karabaj y los crímenes cometidos, el 12 de mayo de 2021, el 16 de noviembre de 2021 y el 13 de septiembre de 2022, las fuerzas armadas de Azerbaiyán recurrieron a una agresión militar a gran escala contra el territorio ya soberano e internacionalmente reconocido de la República de Armenia. Las realidades del uso de la fuerza y ​​las violaciones masivas de los derechos humanos y las continuas agresiones militares llevadas a cabo por Azerbaiyán contra Armenia y Artsaj en el período de posguerra socavan los esfuerzos por establecer la estabilidad y la seguridad regionales", continuó el texto. "Incluso hoy, con el uso de la fuerza y ​​la amenaza del uso de la fuerza, Azerbaiyán está tratando de implementar sus aspiraciones idealistas, rechazando incluso el hecho de la existencia de Nagorno Karabaj como unidad territorial y el conflicto de Nagorno Karabaj".

"La República de Armenia rechaza categóricamente el enfoque de resolver los problemas mediante el uso de la fuerza y ​​la amenaza de la fuerza y ​​reafirma su compromiso con el establecimiento de una paz y estabilidad duraderas y generales en la región mediante negociaciones pacíficas".

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