Mourad Papazian: “Azerbaiyán está prestando un servicio al gobierno de Armenia al mantener en cautiverio a los líderes político-militares de Artsaj”

20 de diciembre de 2023

En una entrevista realizada por el portal aravot.am Mourad Papazian, miembro del Buró de la Federación Revolucionaria Armenia (FRA-Tashnagtsutiún) y copresidente del Consejo de Coordinación de las Organizaciones Armenias de Francia (CCAF), se refirió a la situación de los cautivos armenios en Azerbaiyán. Por sus ideas políticas y declaraciones, Mourad Papazian tiene actualmente prohibida la entrada a Armenia por parte del Gobierno de Nikol Pashinyan, que justificó su decisión con noticias falsas y lo deportó el pasado 13 de julio antes de su entrada al país.

-Más de 150 figuras reconocidas mundialmente, incluidos los premios Nobel, ex jefes de Estado y personalidades humanitarias, pidieron la liberación inmediata e incondicional de los prisioneros y cautivos armenios retenidos en Bakú. Se llevó a cabo el juicio de 32 prisioneros, pero más de 20 prisioneros confirmados por Azerbaiyán, incluidos ocho líderes militares y políticos de Artsaj, permanecen en las prisiones de Bakú. ¿Tendrá esa recolección de firmas de apoyo algún efecto?

-La iniciativa internacionaliza la cuestión y la pone en escena pública, pero ciertamente no es suficiente para “convencer” a Ilham Aliyev de que debe liberar a los prisioneros armenios. Por cierto, este compromiso quedó fijado en el comunicado tripartito del 9 de noviembre de 2020. En ese momento, los dirigentes armenios liberaron a casi todos los prisioneros de guerra y otros detenidos azerbaiyanos sin establecer la condición de que todos los prisioneros de guerra y otros detenidos armenios fueran liberados inmediatamente. En otras palabras, no intercambiaron, y esto significa que Armenia no tiene gobernantes maduros; de lo contrario, se habría planteado claramente la cuestión de los prisioneros y otras personas detenidas. En cuanto a los ocho ex dirigentes militares y políticos de Artsaj, debo decir que su cautiverio es una realidad lamentable. Azerbaiyán está ejerciendo presión moral sobre estas personas por sus posturas pro-armenias y pro-Artsaj. Estas personas fueron en contra de la posición oficial de Azerbaiyán, declarando que Artsaj debería seguir siendo armenio.

Nosotros, los representantes de la diáspora, debemos ciertamente continuar trabajando para lograr su liberación. Hay un trabajo visible y otro que no se ve, pero me sorprende bastante que la maquinaria diplomática de Armenia no funcione en esta dirección, que no haga ningún esfuerzo por liberar a los ex líderes militares y políticos de Artsaj.  Los dirigentes de Armenia no ejercen ninguna presión internacional en este sentido. Deberíamos intentar presionar a los dirigentes de la República de Armenia para que trabajen en esta dirección a nivel estatal, utilizando las palancas estatales para presionar a nivel internacional. Por ejemplo, en Francia estamos trabajando activamente, probablemente habrán notado que entre los 150 firmantes también se encuentran líderes franceses, la alcalde de París, entre otros. Anne Hidalgo también celebró una conferencia de prensa en la que pidió la liberación inmediata de todos los prisioneros armenios detenidos en las prisiones de Bakú, destacando a los ocho altos dirigentes de Artsaj.

-Usted dice que se debe ejercer presión adicional sobre la comunidad internacional para que ésta también ejerza presión sobre el Presidente de Azerbaiyán. ¿Qué se debe hacer, por ejemplo? Además, considerando que la ONU tuvo que aceptar la candidatura de Azerbaiyán para albergar la COP 29 sólo si todos los cautivos eran liberados y se había dado el acuerdo, ¿podría ser esto una esperanza de que existan acuerdos internos para devolver a todos los cautivos?

-Todavía falta un año para la COP 29. Tenemos que trabajar seriamente con la comunidad internacional y lo estamos haciendo. Hace unos días fuimos recibidos por la alcalde de París y la dirección de nuestro trabajo fue exactamente esa: la COP 29 no puede tener lugar en Azerbaiyán si los prisioneros armenios todavía están en sus prisiones. Pero la UE, que tiene buenas relaciones con Azerbaiyán porque compra gas a ese país, varios Estados miembros e instituciones de la UE también deberían presionar a Azerbaiyán. Y para eso se necesita el trabajo de las comunidades armenias y de la diáspora. Una cosa está clara: se debe continuar el trabajo activo con la comunidad internacional para que Aliyev comprenda que no tiene otra opción que devolver a todas las personas capturadas, incluidos los altos funcionarios de Artsaj.

-Usted argumentó que la diplomacia armenia no funciona en esa dirección, es decir, no hay ningún esfuerzo serio a nivel estatal con respecto a la liberación de los líderes militares y políticos de Artsaj. Si el Estado no hace esto, ¿qué otras palancas tiene la diáspora? ¿Hay que ejercer presión sobre la comunidad internacional?

-Ya sabes, el Estado vendió Artsaj, pero nosotros, la diáspora, continuaremos nuestra lucha para que la comunidad internacional no cierre el tema Artsaj. Un ejemplo son las declaraciones del presidente francés y de las estructuras diplomáticas sobre garantizar el derecho de retorno del pueblo de Artsaj. Este es el primer paso, e incluso si los dirigentes de Armenia no están en esta línea, debemos hacer todo lo posible para que otros Estados, estructuras diplomáticas y personas influyentes promuevan el hecho de que el pueblo de Artsaj debería poder regresar a Artsaj de forma segura. Como bien sabrán, el Gobierno de la República de Armenia y la diáspora no están en la misma línea en una serie de cuestiones, pero la cuestión de los prisioneros de guerra es una cuestión importante y desde la diáspora, deberíamos presionar al gobierno de la República de Armenia para que primero cumpla su deber. En segundo lugar, debemos trabajar en esa dirección con nuestras conexiones e influencias. Si el Gobierno de Armenia rechaza este trabajo, eso no significa que la diáspora también deba negarse. Se trata de un fenómeno doloroso e inaceptable, pero tenemos lo que tenemos.

-Según sus valoraciones, ¿cuál es el objetivo de Azerbaiyán al mantener cautivo al liderazgo político-militar de Artsaj?

– Creo que Azerbaiyán no gana mucho reteniendo a esa gente, especialmente desde que Artsaj fue derrotado. La única explicación lógica de esta situación, en mi opinión, es que al mantener cautiva la dirección político-militar de Artsaj, Bakú está prestando un servicio al Gobierno de la República de Armenia. Supongo que si esas personas regresan a Armenia, especialmente el ex Ministro de Estado de Artsaj Ruben Vardanyan, pueden crear serios problemas al gobierno de Nikol Pashinyan.

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