Nikol Pashinyan: "El lema del 2022 debe ser el renacimiento"
El primer ministro armenio Nikol Pashinyan publicó un mensaje con motivo del año nuevo el 31 de diciembre. Ese mismo día, el Primer Ministro visitó posiciones militares y se encontró con soldados y comandantes luego de homenajear a los caídos en el panteón militar de Yerablur.
"Nuestros pensamientos y corazones están ante todo con nuestros hermanos y hermanas y sus familias que sacrificaron sus vidas por la patria. Después de la tragedia de la guerra de 44 días en 2020, nacieron niños en muchas familias. Nuestros mártires en el campo de batalla están renaciendo", dijo Pashinyan. "Literalmente renacen, porque muchos recién nacidos en 2021 llevan el nombre de su hermano mártir, apellido y patronímico. Mismo nombre, apellido, patronímico. Esta es una profunda revelación, la victoria de la vida, la encarnación de la mitología, nació en 2001, murió en 2020, renació en 2021", agregó. En ese sentido, anunció un "programa estatal para restaurar la salud reproductiva en las familias de las víctimas en enero de 2022" y, en los casos que no sea posible, "las familias de nuestros niños martirizados tendrán la oportunidad de postularse para las madres sustitutas financiadas por el Estado". "El renacimiento es una política de estado, y el lema del 2022 debe ser el renacimiento".
"Garantizar la seguridad es nuestro mayor desafío hoy en día, y la experiencia demuestra que la forma más confiable de garantizar la seguridad es a través de la paz. Al mismo tiempo, el tema clave es la reforma de nuestras Fuerzas Armadas, el Ejército. Armenia debe tener un ejército profesional, además, con cada vez más mujeres involucradas. En la perspectiva estratégica, el servicio militar obligatorio debe cambiar significativamente, transformándose en ejercicios de entrenamiento de combate obligatorios, que deben realizarse varias veces en la vida, con cierta frecuencia. Quiero enfatizar que políticamente nuestro ejército no se propondrá la tarea de ganar territorios, su tarea es proteger la seguridad e integridad territorial de nuestro país", declaró el Primer Ministro.
"Todos los pasos del gobierno tienen como objetivo la reactivación y un futuro pacífico. En la apertura de las comunicaciones regionales y los procesos de delimitación y demarcación de las fronteras hay muchos riesgos, pero también muchas oportunidades, y nuestra política está orientada a gestionar y neutralizar los riesgos, y aprovechar las oportunidades existentes. La solución del conflicto de Nagorno Karabaj con la plena protección de los derechos de los armenios de Artsaj es nuestro objetivo estratégico", continuó.
"El 2021 fue un año difícil, que comenzó con la crisis socio-psicológica y política provocada por los horrores de la guerra. A veces, parecía que los disturbios de la posguerra se convertirían en caos y luchas civiles. Pero quiero señalar que 2021 también se convirtió en una prueba de la viabilidad de Armenia y del pueblo armenio, porque para sorpresa de muchos, pudimos devolver el proceso a un curso político pleno, dando a los ciudadanos de la República de Armenia la oportunidad para expresarse y tomar decisiones por su propia voluntad. Las elecciones parlamentarias anticipadas de 2021 recibieron una gran atención internacional porque la comunidad internacional todavía encuentra asombroso que Armenia haya podido celebrar elecciones libres, justas y democráticas en tales condiciones", opinó Pashinyan. "Hoy, la comunidad internacional ve a Armenia como una fuerza líder para la democracia, y este es un logro que no debemos perder. Nuestra tarea es hacer de la democracia una consideración, un factor real para la seguridad, la prosperidad y el desarrollo de nuestro país. La democracia debe convertirse en el motor del renacimiento y el futuro. Armenia volvió a demostrar su compromiso con la democracia y los valores democráticos en las elecciones locales de octubre-diciembre de 2021", planteó.
Más adelante, Pashinyan anunció aumentos para los salarios de docentes y científicos, así como también la construcción y renovación de 300 escuelas y 500 jardines de infancia.
"Como resultado de la guerra, estamos en un punto cero, y quizás es hora de que el tiempo trabaje a nuestro favor. Brindemos por una Armenia y Artsaj libres, pacíficas, renacidas y reconstruidas", finalizó Pashinyan.