Se cumple el 31º aniversario de la masacre de la población armenia de Maragha por parte de Azerbaiyán

El 10 de abril de 1992, hace 31 años, el Ejército de Azerbaiyán llevó adelante una “brutal masacre planificada de civiles en el asentamiento armenio de Maragha, en la región de Martakert, en Nagorno Karabaj, como resultado de lo cual el asentamiento con una población de unas 5.000 personas fue completamente sometido a limpieza étnica”, según informó la Cancillería de Armenia en un comunicado.

“Más de 50 civiles fueron brutalmente asesinados y el mismo número fueron capturados según datos documentados en informes de Human Rights Watch y Amnistía Internacional. El destino de muchos de los cautivos no se ha esclarecido hasta el día de hoy, y se considera que estos últimos fueron desaparecidos forzosamente”.

“La masacre de Maragha fue una continuación de las masacres organizadas de armenios en Sumgait, Kirovabad y Bakú y una de las manifestaciones habituales de los crímenes en masa cometidos por las autoridades de Azerbaiyán por motivos de identidad nacional. Los crímenes premeditados contra la población civil de Nagorno Karabaj, los crímenes de guerra, su impunidad y su glorificación se convirtieron en parte de la política sistémica de Azerbaiyán y recibieron nuevas manifestaciones en la agresión de abril de 2016 de Azerbaiyán contra Nagorno Karabaj y en mayor escala, en la guerra de 2020. Durante la guerra de 44 días, como resultado, decenas de miles de armenios de Hadrut, Shushí y las regiones vecinas también fueron desplazados”, detalló la Cancillería.

“No es casualidad que no solo entre 1988-1991, a lo largo de los años, los armenios desplazados de Nagorno Karabaj nunca tuvieron la oportunidad de regresar a sus hogares y ejercer sus derechos, incluida la gestión de su propiedad privada, e incluso ahora, en violación de las disposiciones de la declaración tripartita del 9 de noviembre de 2020, Azerbaiyán está interrumpiendo el regreso de personas desplazadas y refugiados a Nagorno Karabaj y las regiones circundantes, que debe llevarse a cabo bajo la supervisión del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Además, en violación de las normas del derecho internacional y de las obligaciones internacionales asumidas por sí misma, las autoridades de Azerbaiyán en estos días están poblando los asentamientos armenios bajo su control, las casas de los armenios, como en el pueblo armenio de Talish, con azerbaiyanos”, denunció Armenia.

“También cabe señalar que, en violación flagrante de las sentencias de los tribunales internacionales autorizados, Azerbaiyán continúa profanando, destrozando y destruyendo abiertamente los monumentos y santuarios religiosos e histórico-culturales armenios, con el objetivo de borrar el rastro armenio de los territorios bajo su control. Al mismo tiempo, la propaganda de odio hacia los armenios continúa al más alto nivel. Estos protocolos ya han sido condenados reiteradamente por instituciones internacionales. 31 años después del crimen de Maragha, Azerbaiyán ha estado bloqueando ilegalmente el Corredor de Lachin que conecta Nagorno Karabaj con el resto del mundo durante unos cuatro meses. La creación deliberada de una crisis humanitaria en Nagorno Karabaj, las violaciones periódicas del alto el fuego y las acciones agresivas de las fuerzas armadas de Azerbaiyán en Nagorno Karabaj, los continuos ataques e intimidación de la población civil demuestran una vez más que el objetivo de Azerbaiyán es someter a Nagorno Karabaj a una limpieza étnica”, finalizó la Cancillería armenia.

“Hoy rendimos homenaje a la memoria de las víctimas de la masacre de Maragha. Para seguir previniendo tales crímenes, enfatizamos una vez más la urgencia de utilizar los pasos activos de la comunidad internacional, incluidos los mecanismos internacionales disponibles. La República de Armenia reafirma su compromiso con el establecimiento de una paz y seguridad integrales y duraderas en la región, lo que es posible si Azerbaiyán abandona la política extremista y agresiva y busca soluciones justas a los problemas existentes”.