El metro de Barcelona retiró las propagandas de Azerbaiyán con fotos de las tierras ocupadas de Artsaj
El Metro de la ciudad de Barcelona decidió retirar los carteles de propaganda de Azerbaiyán con fotos de las tierras ocupadas de Artsaj (Nagorno Karabaj) el 25 de junio, luego de fuertes críticas de la comunidad local.
El embajador de Armenia en España, Vladimir Karmirshalyan, informó que el director del Metro de Barcelona, Ramon Bacardí Gascon, le aseguró que los carteles fueron removidos y que se trató de una cuestión de la empresa que presta servicios publicitarios y no de la administración del metro.
La comunidad armenia de Barcelona había publicado un comunicado el 14 de junio en el que rechazó la “publicidad engañosa y provocativa” que el Gobierno de Azerbaiyán colocó en el metro de la ciudad días atrás. “Los carteles muestran territorios y ciudades de Artsaj (Nagorno Karabaj), incluso la histórica ciudad armenia de Shushí, ocupadas por las fuerzas azeríes durante la invasión de otoño de 2020. Una guerra provocada por Azerbaiyán con la participación activa de Turquía y mercenarios sirios”, denunció la comunidad armenia. “Barcelona, ciudad referente en la defensa de los derechos humanos, no debe permitir la propaganda oficial del gobierno dictatorial de Azerbaiyán, por ello instamos al Ayuntamiento de Barcelona y al Consejo de Administración de TMB la retirada inmediata de los carteles publicitarios referidos. Asimismo, hacemos un llamamiento a la empresa JCDecaux para que, teniendo en cuenta su objetivo comercial, deje de ser partícipe indirecto de la información manipulada de la tiranía azerí”, finalizó el comunicado.
La propaganda azerbaiyana llegó días después de que el Parlamento de Cataluña aprobara el 25 de mayo por unanimidad una resolución en la que pidió a Azerbaiyán que libere a los prisioneros de guerra armenios, secuestrados durante la guerra de Artsaj (Nagorno Karabaj) en 2020.
La ciudad de Shushí se encuentra ocupada de forma ilegal por Azerbaiyán desde noviembre de 2020. La independencia de Artsaj de 1991, al ser declarada en base a la legislación correspondiente de la entonces Unión Soviética, fue un hecho jurídicamente legítimo dentro del derecho internacional, mientras que la Convención de Montevideo brindó el marco legal para considerar a la República de Artsaj un estado, a pesar de no ser reconocida por otros países. La conquista de Azerbaiyán contra una zona que se había declarado independiente fue una ocupación ilegal del territorio.