“Erdogan pone en evidencia su total desprecio a los valores espirituales de la civilización universal”
La decisión del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, de convertir el histórico templo de Santa Sofía (o Hagia Sophia) en una mezquita continúa sumando rechazos a lo largo del mundo.
El Consejo Nacional Armenio de Sudamérica emitió un comunicado sobre el tema y afirmó que “con este decreto, Erdogan pone en evidencia su total desprecio a los valores espirituales de la civilización universal y provoca directamente a cualquier pensamiento a favor de la multiculturalidad en su país”. “Turquía hace oídos sordos a las voces que se alzaron en contra de esta decisión y continúa con su plan de sumar discordias, atentar contra la paz, fomentar la intolerancia y la enemistad religiosa”, agregó el organismo.
Por su parte, IARA – Instituciones Armenias de la República Argentina planteó que “la medida adoptada por el mandatario turco golpea fuertemente la convivencia entre cristianos y musulmanes en Medio Oriente, en línea con su política de intervención militar en la región y el negacionismo reactivado del crimen de genocidio que los Jóvenes Turcos llevaron adelante en la Primera Guerra Mundial contra armenios, griegos, asirios”. En ese sentido, IARA se sumó al repudio de líderes y organizaciones mundiales, “esperando una condena similar del gobierno argentino”.
El Catholicós de todos los armenios, Karekin II, pidió a las autoridades turcas que reconsideren la decisión y vuelvan al principio de “una coexistencia pacífica de oración de diferentes comunidades religiosas” en el país. Según el líder religioso, la política del gobierno turco evoca graves recuerdos de profanación y destrucción de santuarios armenios y de otras naciones cristianas por las autoridades otomanas.
El Alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, opinó que “esta decisión inevitablemente alimentará la desconfianza, provocará una división renovada entre las comunidades religiosas y socavará nuestros esfuerzos de diálogo y cooperación”. “Hubo un amplio apoyo para pedir a las autoridades turcas que reconsideren urgentemente y reviertan esta decisión”, afirmó luego de una reunión entre Cancilleres europeos.
El Papa Francisco afirmó estar “muy dolido” por el hecho el 12 d ejulio, luego de que se conociera la información de que las autoridades turcas planeaban tapar y ocultar los mosaicos y frescos cristianos durante las oraciones musulmanas que se llevarán a cabo el 24 de julio. Sus palabras se sumaron a las de organismos como la UNESCO o el Consejo Mundial de Iglesias, quienes también pidieron revisar la decisión.
Santa Sofía es una histórica casa de culto de Estambul que ofició como catedral patriarcal cristiana ortodoxa griega y luego catedral católica romana desde su construcción en el año 537. Durante la conquista otomana fue convertida a mezquita, y luego, con la llegada de Mustafá Kemal al poder, se mantuvo como museo secular. El templo es actualmente una de las principales atracciones turísticas del país por considerarse un hito de la arquitectura bizantina. El pasado 10 de julio, un tribunal turco habilitó la transformación del templo, declarado patrimonio cultural de la humanidad.