Contradicciones de Ilham Aliyev en una entrevista: “Nagorno Karabaj es una cuestión de orgullo nacional”

31 de octubre de 2020

El 31 de octubre, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, brindó una entrevista al canal de televisión ARD de Alemania donde se evidenciaron una gran cantidad de contradicciones del relato oficial sobre la guerra contra Armenia y Artsaj.

El Presidente de Azerbaiyán comenzó justificando sus ataques ya que Armenia "comenzó a disparar cohetes contra ciudades alejadas de la línea de contacto, y tenemos muchas bajas civiles: 69 personas hasta ahora. Por eso tuvimos que defendernos y responder a nosotros mismos y a nuestra gente. Nuestra respuesta fue dura, pero se lo merecían".

Cuando el periodista le consultó acerca de la utilización de municiones de racimo, algo denunciado y probado por las organizaciones de derechos humanos Amnistía Internacional y Human Rights Watch, Aliyev lo negó: "No los usamos. Nos estamos defendiendo. Hemos invitado a Amnistía Internacional y Human Rights Watch a Azerbaiyán. Desafortunadamente, cubren los eventos solo desde Armenia. No nos solicitaron venir aquí. Por tanto, tenemos grandes dudas sobre su sesgo". El periodista recordó que los organismos intentaron varias veces visitar Azerbaiyán pero Aliyev "no los dejó entrar". "No, es imposible", respondió el Presidente azerbaiyano, a pesar de que ambos organismos denunciaron en reiteradas oportunidades que tenían la entrada prohibida a Azerbaiyán. "Hasta ahora, Human Rights Watch y Amnistía Internacional han sido muy agresivos con Azerbaiyán", agregó Aliyev. "Hay personas de origen armenio en sus organizaciones y estas organizaciones se utilizan principalmente para dañar la imagen de Azerbaiyán", dijo, sin dar más detalles. A pesar de tener prohibida la entrada a Azerbaiyán, tanto HRW como AI dijeron que existió una utilización de bombas de racimo “por parte de Armenia por primera vez en el actual conflicto de Nagorno Karabaj, tras un ataque a la ciudad de Barda en Azerbaiyán”, lo que contradice la idea de Aliyev de que solo "dañan la imagen de Azerbaiyán".

Sobre el posible status de Karabaj, marcó que no llegaron a un acuerdo sobre una posible autonomía: "Los armenios exigieron la independencia, con la que no estábamos de acuerdo. Ahora las realidades han cambiado". Cuando el periodista le preguntó "¿por qué Karabaj es tan importante para Azerbaiyán?", el Presidente de Azerbaiyán declaró: "Esta es nuestra tierra, nuestro territorio reconocido internacionalmente. No es cuestión de recursos. Los principales recursos están aquí en Bakú. Esta es una cuestión de justicia, es una cuestión de orgullo nacional y esta es una cuestión de derecho internacional".

Luego, Aliyev repitió su relato oficial falso acerca del status jurídico de Artsaj: "El derecho internacional y toda la comunidad internacional reconocen a Nagorno Karabaj como parte integral de Azerbaiyán. Estamos restaurando la justicia y estamos implementando las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que han permanecido en el papel durante 27 años". Las cuatro resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU son mandatos para que el conflicto se resuelva a través del Grupo de Minsk de la OSCE y todas exigen la no utilización de la fuerza en el conflicto, por lo que es incorrecto decir que Azerbaiyán tuvo el mandato de esas resoluciones para iniciar la guerra. Tampoco es correcto que la comunidad internacional reconozca a Karabaj como parte de Azerbaiyán, ya que la población de Karabaj declaró su independencia en 1991 bajo la misma legislación soviética e internacional con la que se independizó la propia Azerbaiyán.

Posteriormente, Aliyev negó que la población armenia sea originaria de la región de Nagorno Karabaj: "¿La mayoría de los historiadores y expertos del Cáucaso están equivocados?", le preguntó el periodista. La respuesta de Aliyev fue: "Sí, por supuesto".

Al consultar acerca del doble bombardeo a la iglesia de Shushí, Aliyev propuso dos teorías: "Como ya he mencionado, probablemente esto sea un error de nuestra artillería, o la segunda opción es que los armenios lo hicieron ellos mismos para culparnos": "Es una pequeña pérdida. La iglesia no se derrumbó. Se puede reparar en un máximo de dos semanas. Por lo tanto, creemos que pueda haber sido hecho por ellos para culparnos". Las autoridades de Artsaj explicaron en varias oportunidades que no fue un error ya que Azerbaiyán disparó dos misiles contra la catedral de Ghazanchetsots, el primero para destruirla y el segundo para matar a quienes se acercaran al lugar: por este hecho resultaron heridos periodistas.

Luego, el periodista le preguntó sobre el arresto de un hombre que se manifestó a favor de la paz el 1º de octubre: "Algunos expertos y defensores de los derechos humanos dicen que usted inició esta guerra para unir a las personas y desviar la atención de los problemas de la democracia y los derechos humanos en el país". Aliyev respondió: "Esta es una evaluación completamente incorrecta", mientras que negó que haya presos políticos en su país. Cuando el periodista alemán le preguntó si consideraba a Azerbaiyán un ejemplo de democracia, Aliyev acusó a los países europeos de "hacerse pasar por demócratas": "No somos un ejemplo y no nos mostramos de esta manera. Sin embargo, hay países que fingen ser así, pero matan a los manifestantes". El gobierno azerbaiyano es uno de los peores países en el ranking de libertad de expresión de Reporteros sin Fronteras (168 sobre 180 países) y prácticamente todos los medios de comunicación del país están controlados por el gobierno dictatorial de Ilham Aliyev, presidente desde hace 17 años y cuya familia gobernó el país por casi 40 años.

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