La DAIA se reunió con el Embajador de Azerbaiyán
La dirigencia de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) recibió al embajador de Azerbaiyán en Argentina, Bolivia, Paraguay, Chile y Uruguay, Rashad Aslanov, el 24 de febrero.
Del encuentro participaron integrantes del consejo directivo de la DAIA, el presidente Jorge Knoblovits, el vicepresidente 1° David Stalman, el vicepresidente 2° Marcelo Taussiik y el responsable de las relaciones diplomáticas de la entidad, Ariel Blufstein.
Rashad Aslanov fue el responsable de liderar la campaña del Gobierno de Azerbaiyán de desinformación y fake news sobre la guerra de Artsaj en Sudamérica. Además, el diplomático fue quien tomó la decisión de colgar carteles con consignas provocativas durante las manifestaciones de la comunidad armenia a la Embajada azerbaiyana en 2020, un acto que fue considerado como una incitación a la violencia por la dirigencia comunitaria.
Alfonso Tabakian, director del Consejo Nacional Armenio de Sudamérica, criticó “las repetidas muestras de apoyo de esta conducción de la DAIA hacia los representantes de Azerbaiyán, que mantiene una política de Estado de negacionismo del genocidio sufrido por el pueblo armenio y es acusado sistemáticamente por organismos internacionales de violar los derechos humanos de su población”. “Los argentinos de origen judío deberían hacer los cuestionamientos pertinentes a sus dirigentes y luego sacar sus conclusiones”, señaló Tabakian.
El 27 de octubre de 2020, durante la guerra, IARA – Instituciones Armenias de la República Argentina organizó una protesta frente a la Embajada de Israel para pedir el fin de la venta de armamento a Azerbaiyán, luego de que organismos internacionales denunciaran que se había utilizado contra población civil de Artsaj. En esa oportunidad, tanto DAIA como la Embajada israelí intentaron convencer a la dirigencia comunitaria de que suspenda la manifestación.
El 28 de febrero de 2020, el presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits, participó de un acto en la Embajada de Azerbaiyán para “conmemorar el 28º aniversario del genocidio de Jodyalí”, según informó la organización comunitaria, acusando a Armenia de haber cometido un genocidio. El 9 de marzo, la dirigencia de la DAIA recibió a una delegación de IARA y se comprometió a eliminar de su página web y redes sociales el comunicado de prensa.
Lo que se conoce como “la masacre de Khojaly” fue un supuesto ataque de civiles por parte del Ejército de Defensa de Nagorno Karabaj en 1992, durante la primera guerra de Artsaj (Nagorno Karabaj). La posición oficial de Armenia y Artsaj fue que Azerbaiyán no evacuó a la población civil y la utilizó como escudo humano, táctica que utilizaría en la guerra de 2020 al no evacuar a su población en Barda y Ganja. Por su parte, Azerbaiyán afirma que se trató de un “genocidio”, a pesar de que los hechos narrados por el Gobierno azerbaiyano no entrarían en esa categoría jurídica ni sociológica, mientras que ningún tribunal del mundo lo calificó como tal. El régimen de Ilham Aliyev utiliza el hecho no confirmado como propaganda negacionista del Genocidio Armenio de 1915 y fue acusado en reiteradas oportunidades de falsificar evidencias fotográficas y datos.